Isle Fuskova, 88 años, una de las primeras mujeres en declararse públicamente lesbiana frente a televisión, y una activista fundamental en la organización de la Primera Marcha del Orgullo Lésbico-Gay de junio de 1992 dialogó en Feas Sucias y Malas sobre la historia de la Marcha del Orgullo, que hoy tiene lugar en su edición número 26.
«Les pedimos y les exigimos a los compañeros gays que el nombre fuera Marcha Lésbico-Gay y fue así», dice Fuskova mientras recuerda aquella primera marcha en los noventa. «Ese junio hacia un frío bárbaro, pero no lo sentíamos. En el corazón latía la alegría y cantamos: ´alerta, alerta, alerta que caminan gays y lesbianas por las calles argentinas´. Esta canción la había inventado la noche anterior Carlos Jauregui«, suma.
Durante el inicio de la década del 90, ella se une a Gays por los Derechos Civiles junto a Carlos Jáuregui, y fueron determinantes en el entendimiento de lesbianas, gays y las primeras activistas trans así como en la conformación de esa primera movilización en la Ciudad de Buenos Aires.
«Había policía andando cerca y algunas mujeres y varones tenían puesto una máscara porque a toda costa no querían que las ubicaran y les arruinaran su vida y su trabajo. El momento era muy difícil. Hoy podemos decir que hay marchas del orgullo en todo el planeta, aunque no es del todo así«, explicó.
Y siguió sobre su reivindicación histórica, el feminismo: «La liberación de las mujeres es por las que estudian, las que trabajan. Y están las que trabajan para las que aún no comprendieron su libertad del cerebro y del cuerpo personal, porque son muchas las mujeres que no tenemos la lucidez de nuestro cuerpo entero y su increíble capacidad de crear y disfrutar de esos cuerpos que nos fueron ofrecidos. Hubo y hay mujeres guerreras para defenderse del patriarcado que estamos viviendo hace millones de años«.
Entrevistada por Úrsula Asta, la militante cerró: «Adelante lesbianas, adelante tortas, adelante chongos y chongas«.
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