
Renata Mielli, periodista del Centro de medios alternativos Barao de Itararé y corresponsal de Panorama Federal en Brasil, informó desde San Pablo acerca de la situación del gobierno de Michel Témer.
Según Mielli «la reforma laboral en Brasil ya está aprobada por el congreso. Es un cambio muy profundo en nuestra legislación, que databa de 1943 cuando se consolidaron las leyes del trabajo. Ni la dictadura militar hizo una transformación tan produnda en los derechos de los trabajadores. Cambia todas las relaciones entre patrones y empleados, porque quita muchas de las conquistas que nuestro pueblo logró alcanzar. La jornada de trabajo podrá ser aumentada según el antojo de la patronal, se altera la cuestión de las remuneraciones, se ataca con profundidad a los sindicatos porque pasa a tener más valor ante la ley lo que negocia el trabajador individualmente a lo que se negocia por vía sindical. Además las privatizaciones significan un proceso de desnacionalización de nuestra economía, que afectan a los sectores petroleros, eléctrico, de aeropuertos e incluso a la Casa de la Moneda».
La entrevistada también señaló que como respuesta «se está organizando una jornada de movilizaciones por parte de las centrales sindicales, pero por ahora la respuesta es muy débil. Tenemos índices de desocupación muy grandes y esto afecta la capacidad de salir a las calles por parte de los trabajadores. Hay un proceso de criminalización de la asociación política, estamos viviendo una situación de gran dificultad para hacer grandes movilizaciones masivas. Y al mismo tiempo sin luchas sociales será muy difícil revertir este proceso político».
Finalmente y tras ser consultada acerca de algunos planteos militares que se conocieron en las últimas semanas Mielli explicó que «hasta hace pocos días no se veía una movilización de las FF.AA. en torno del proceso de inestabilidad política. Desde la declaración golpista del general Morao, hubo otras expresiones que nos ponen en alerta. El ejército está mirando la situación, no está aislado del problema. El presidente Témer en este momento está siendo investigado por diversas denuncias que lo vinculan con organizaciones criminales, y que están en la Cámara de Diputados. Puede abrirse un proceso casi igual al que derrocó a Dilma Rouseff. Las autoridades alternativas son muy frágiles desde el punto de vista político e institucional. Si se aparta a Temer, ¿qué va a ser de la situación? Puede asumir el presidente de la Cámara de Diputados, pero no tendría respaldo político. O hasta quién sabe puede haber un gobierno militar provisorio convocando a nuevas elecciones«.
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