Eduardo Fratta, uno de las grandes voces del tango y cantante de la orquesta de Alfredo De Angelis, pasó por Radio Gráfica y comentó su experiencia en la orquesta y su vida musical.
– ¿Cómo fue su participación en la Orquesta de Alfredo De Angelis?
– Fue una hermosa experiencia, creo que fue la mejor etapa de mi vida. El carácter benévolo que tenía Alfredo siempre me trato como un hijo. Tuvimos que pasar por algunas peripecias, pero fue una gran época. Alfredo siempre tenía a flor de labio para hacernos picar los nervios antes de salir al escenario. Nunca pensé ser cantante profesional. Agradezco mucho haber tenido compañeros muy buenos, todos aprendimos de Alfredo.
– ¿Qué se hablaba antes de salir al escenario?
– Siempre recordamos la década del 50. Alfredo había tenido un éxito inigualable. Era tremenda la popularidad que tenía, gustaba mucho. Se llevaba todo por delante.
– ¿Cómo se llevaba con las otras orquestas?
– Todas las orquestas se llevaban bien y no había rivalidad. No había esos choques entre músicos, como suele pasar ahora. Los tangos se pasaban entre los músicos.
– ¿Cuáles eran tus cantantes preferidos de ciclos anteriores al tuyo? ¿Y de tu época?
– Podría decirte Aníbal Troilo pero todas las orquestas tenían su valor porque cada una tenía su estilo. De mi época nombraría a Rubén Juárez, Leopoldo Federico, entre otros.
– Seguís teniendo la misma voz. ¿Qué hiciste?
– Yo no me gasté, antes de estar en la Orquesta solo hice un dúo. Después me volví loco, era mucha la responsabilidad ser parte de la misma.
– ¿Hubo algún tipo de campaña para ignorar al tango?
– “En la década de los 60 hubo gente que colaboro para que se desplace el tango. Querían destruir el acervo popular y romper las matrices”.
– ¿Cómo ves la juventud y el tango?
– Hay jóvenes que están acercándose al tango, pero hay cosas que las hacen bien y otras que no. Esto tiene que ver con que no tienen de quien aprender.
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