Así lo expresó el líder radical Leopoldo Moreau en Desde el Barrio.
Consultado por Carlos Aira y Carla Pelliza, sobre el congreso del radicalismo popular desarrollado en Parque Norte, el referente alfonsinista opinó sobre el discurso de la presidenta que cerró el mismo: «Fue el discurso de una militante del campo popular. Vuelve a plantear con fuerza la tesis de la transversalidad. En definitiva, amalgamar las fuerzas populares con diversas culturas históricas para confrontar con un bloque conservador que plantea desafíos a los proyectos de inclusión social»
Añadió que «los gestos y contenidos del acto nos muestran que estamos haciendo una construcción política de nuevo signo. Estamos gestando un nuevo sujeto político con la experiencia acumulada en 31 años de democracia. Estamos dejando atrás una antinomia peronismo-radicalismo. Hay que capitalizar para siempre el legado de Democracia para Siempre que consolidó el alfonsinismo y unirlo a la Patria de Todos que trajo Néstor y Cristina, pilares de una nueva Argentina».
Sobre el acto en sí, Moreau remarcó la «alegría de la juventud. La misma que se fue llorando de la convención de Gualeguaychú, luego de la intensión de Sanz y su camarilla de entregar el partido al proyecto de restauración conservadora que plantea Mauricio Macri».
Consultado sobre el futuro del radicalismo popular, Moreau fue cauto: «No hemos debatido candidaturas porque privilegiamos el proceso. Las elecciones son una forma de dirimir legalidad y legitimidad. Nosotros participaremos del bloque nacional, popular y democrático, pero todavía no sabemos desde donde. Buscamos consolidar este espacio político. En Parque Norte predominó la cultura radical, pero vinieron hombres y mujeres de otras procedencias, como Virginia González Gass, Félix Díaz o Malvina Tosco, hija del emblemático Agustín Tosco. Todos parte del nuevo sujeto político que abarca el puente histórico entre el Yrigoyenismo y el Peronismo, y lo excede porque incorpora hombres y mujeres que probablemente nunca suscriban una ficha partidaria, pero si una ficha de afiliación a la Argentina».
Finalmente, Moreau dio cuenta de las internas radicales y el nuevo mapa politico: «Si hay pejotistas que están con Massa, De la Sota o Rodríguez Saa, lo mismo sucede con la UCR. Por eso digo que estamos ante un rediseño del sistema político argentino. Hay radicales y peronistas que se cruzan. También progresistas. Por eso estalló en mil pedazos. Este acercamiento al kirchnerismo hubiera existido más allá del congreso de Gualeguaychú. Hay elementos comunes. Hay coincidencias».
Explicó en ese sentido que «en Derechos Civiles es fácil emparentar la Ley de Divorcio de Alfonsín con la Ley de Matrimonio Igualitario, o emparentar la política exterior de integración regional que inició Alfonsin con el Mercosur y profundizó el kirchnerismo con el Unasur. No nos une el espanto. Hay que tomar en cuenta los mismos enemigos, pero nos une un camino común. Alfonsin – como Kirchner – se anticipó cuando planteó crear el Tercer Movimiento Histórico y Kirchner la Concertacion. Fallidas en su instrumentación pero no en sus ideas, así superamos las antinomias».
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