El día viernes el Parlament Catalán aprobó la declaración de Independencia de la región. Fue 26 días después del referéndum organizado por la Generalitat catalana que dio la victoria al SÍ con casi 3 millones de votos. “Era un clamor que suceda esto, después de la jornada del 1° de octubre, la gente tenía la ilusión de que se declare la independencia” comentó Andrés Cavallin, argentino catalán por adopción que dialogó con Desde el Barrio desde las movilizaciones barcelonesas en apoyo a la independencia.
Luego de amenazas y evaluaciones por parte del Gobierno de España, su presidente Mariano Rajoy del Partido Popular envió al Congreso la solicitud de implementación del Artículo 155 de la Constitución Española que dispone la “intervención de provincias secesionistas”. El mismo viernes, en contrapartida a la declaración de independencia, fue aprobado por el Senado Español la aplicación de este artículo, con 214 votos a favor y 47 en contra por lo cual se removió a Carles Puigdemont (quien no se da por destituido) como presidente de la Generalitat y tomó el mando provisoriamente la vicepresidenta española Soraya Sáenz de Santamaría.
“España siempre se vio democrática pero no es así, en todo este tiempo mantuvo su forma aplastadora, porque cuando estaba la derecha siempre boicoteó todo lo que tenía que ver con la ampliación de libertades tanto en Cataluña como en el País Vasco” señaló Cavallin “Acá hay un tema que es la independencia pero hay una unión para sacarse de encima a España y al socialismo”.
Durante los últimos meses, la represión de las fuerzas españolas avanzó duramente sobre los catalanes y ante este punto cúlmine hay preocupación. “Hay mucho temor porque hay dos presos políticos (Jordi Sánchez y Jordi Cuixart). Uno es el presidente de la Asamblea Nacional Catalana y el otro de la Òmnium Cultural. Actualmente se encuentran presos y pueden llegar a estar 30 años en la cárcel”.
Luego de este viernes se eleva la tensión institucional entre España y Cataluña. La remoción de Puigdemont está a cargo de la justicia y los embates del Partido Popular continúan desde los medios de comunicación centralistas. “Se votó la independencia en urnas pero ahora pidieron votar en secreto para ocultarlo por temor a que los acusen judicialmente. Hay miedo, tenemos que salir a las calles pacíficamente para resistir”, concluyó Cavallin.
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