Mirta Coronel, integrante del Movimiento Campesino de Santiago del Estero (MOCASE) Vía Campesina, visitó Radio Gráfica y fue consultada en el programa Feas, Sucias y Malas sobre la aprobación en el Senado de la prórroga de la ley 26.160 que garantiza la posesión y propiedad de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades originarias del país.
La integrante del Mocase Vía Campesina informó cual es la situación de los pueblos originarios en Santiago del Estero y explicó que están “padeciendo las órdenes de desalojo que dan los jueces apañando a los terratenientes”. Y agregó que “las fuerzas policiales queman los ranchos, matan animales y se llevan detenidos a compañeros”.
“Nos convocamos como pueblo, porque sabemos que tenemos que estar presentes porque la ley de las tierras de pueblos originarios es de todos los pueblos y esta lucha no ha terminado”, añadió sobre la movilización realizada hace algunos días en el Congreso, cuando se prorrogó la norma en el Senado. Las comunidades, de todas maneras, siguen acampando allí ya que la ley vigente tiene fecha de vencimiento el 23 de noviembre de este año. Ahora, el proyecto pasó a Diputados, que deberá darle sanción definitiva o devolverlo con modificaciones a la cámara alta.
En comunicación con Úrsula Asta, Coronel comentó los motivos por los cuales es necesaria la prórroga de la ley: “Actualmente han quedado muchas comunidades sin ser relevadas. Es muy importante la prórroga para que nuestros equipos jurídicos tengan la posibilidad de presentar esas carpetas (que permiten el registro de comunidades aún no relevadas) y que cuando realicen denuncias impedir los desalojos en nuestras tierras”. Asimismo explicó que “el revelamiento del territorio es el reconocimiento del Estado nacional y provincial como pueblo originario, donde no pueden venderse las tierras».
“En Santiago del Estero no hubo revelamientos, desde que asumió este Gobierno se paralizaron”, denunció. Y manifestó que “en el momento que se estaba votando la prórroga de la ley, estaban desalojando a una familia en Santiago del Estero”. “Cuando la familia no estaba en su casa, se llevaron sus pertenencias y le tiraron abajo la casa. También el referente la comunidad acudió ni bien se enteró y al llegar fue detenido por las fuerzas policiales, las otras personas fueron recibidas con balas de goma. Esto lo venimos denunciando hace mucho tiempo”, dijo.
Por su parte, se explayó sobre el conflicto por la tierra que tienen, entre otras, con la empresa de gaseosas Manaos: “En la comunidad donde hubo una gran represión, le pusieron veneno al agua, mataron a los animales, hubo quema de ranchos. Hasta pusieron bandas armadas, que son aquellos vecinos de ese territorio que son contratados por empresas privadas para controlar las tierras”.
Finalmente, concluyó con firmeza: “Vamos a seguir luchando para que a todos nos respeten nuestros derechos. Nosotros como campesinos nunca hemos usado armas de fuego, siempre dialogamos, pero tenemos el derecho de defendernos para mantener nuestros territorios. Nos dicen que somos violentos porque la justicia está del lado de los empresarios. Hay que estar organizados para poder salir adelante”.
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