La laguna La Picasa, ubicada entre Buenos Aires, Córdoba y Santa fe, se encuentra desbordada. La situación es alarmante, el colapso económico inminente. Cristina Navarro, corresponsal de Santa Fe, dialogó con Panorama Federal al respecto y aseguró que la situación que se está atravesando “es lamentable”.
“La Picasa recibe agua de San Luis, Córdoba y el norte de la provincia de Buenos Aires. Entonces se hace como una gran palangana que no tiene salida”, explicó Navarro. Y agregó que “el curso del agua sería hacia Junín, es decir, volvería a Buenos Aires. Pero, la gobernadora no nos permite que saquemos agua por ahí. A esto se le suma la problemática de los canales clandestinos de los campos».
En comunicación con Ariel Weinmann, la corresponsal de Santa Fe manifestó que “el agua de la laguna está haciendo una gran presión sobre la ruta 7”. “Más de 30 camiones por día están volcando piedras sobre la orilla de la ruta para sostener”.
Además, Cristina Navarro confesó que se corre “muchísimo peligro”. “La laguna está 30 metros arriba de la ciudad de Junín, con pueblos aledaños hacia Rufino. Si llegase a estallar esta gran palangana de agua va a ser una catástrofe tremenda (…). A su vez, la gente está arruinada económicamente”.
Finalmente, Navarro hizo referencia a la situación que está atravesando el pueblo Diego de Alvear. “Entrás al pueblo, que tiene pavimento, y el agua sale por arriba. Ahí hay 70 mil habitantes (…). Solamente se necesita la orden de la gobernadora María Eugenia Vidal para aliviar un poco la laguna con un bombeo. Tan solo sacar medio metro de agua nos permitiría ceder un poco la presión sobre la ruta, a la que se le está tirando toneladas de piedras para que sostenga el agua que está haciendo presión del norte hacia el sur”.
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