Durante la tarde del jueves 25 de febrero la Policía Metropolitana reprimió a trabajadores de la economía popular en las inmediaciones de la Estación Liniers. Fue en el marco de una serie de allanamientos realizados de forma irregular, según denunciaron representantes de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP).
En declaraciones a Radio Gráfica Simón, vecino del lugar y testigo presencial de la represión, narró que en primer lugar «había un cerco de la metropolitana». Posteriormente «le tiraron gas lacrimógeno a una chica en la cara y la situación se puso picante con los trabajadores, sobre todo con los africanos, que se revelaron y comenzaron a pelearse con la policía».
En comunicación con Abramos la Boca, Gabriela Olguin, representante de la CTEP, remarcó la irregularidad del accionar de los funcionarios públicos: «en realidad cuando pregunté por los funcionarios que se hacían cargo del operativo, la Policía Federal me dejó bien en claro que mismo estaba a cargo de la Metropolitana» y añadió que pudo «dialogar con la Metropolitana, dijeron que hubo una orden de allanamiento por parte la fiscalía».
Sin embargo, Olguin denunció que los efectivos de seguridad «nunca le mostraron a los trabajadores que fueron allanados brutalmente» las ordenes de allanamiento. Asimismo contó que «los funcionarios policiales se encargaron de decirme bien claramente que con el nuevo protocolo de seguridad ellos podían decidir cundo era oportuno reprimir una protesta sin necesidad de una orden fiscal».
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