Azucena Racosta, especialista en comunicación y criminología, dialogó en Feos, Sucios y Malas sobre el decreto de Emergencia en Seguridad, el peligro que esa medida implica para parte del pueblo argentino y la detención de la militante Milagro Sala.
“Me parece que esta Emergencia en Seguridad, como toda Emergencia en Seguridad, tiene que ver con una cuestión presupuestaria de tener una nueva caja”, declaró Racosta y luego agregó que también “esto es una profundización de los sistemas de control”. “Vienen a llenarse los bolsillos y a militarizar nuestra amada Argentina”, dijo.
La integrante de la experiencia comunicacional en cárceles Radio La Cantora, analizó: “Si hasta no hace mucho tiempo el enemigo de época era el pibe chorro, como lo fue en los 70 el subversivo, finalmente seremos todos narcotraficantes o terroristas para este gobierno. Quienes ocupemos las cárceles seremos los militantes”.
“Esta cuestión de establecer los códigos de la guerra para un objetivo político es bastante común”, explicó y recordó que en los 70 los militantes fueron los “subversivos”, que en los 90 al devastar nuestro país y dejar miles de argentinos desocupados cartoneando, nuestros compatriotas devinieron, según el establishment, en “pibes chorros”. Es decir, “la sociedad se convenció de que estaba en peligro por los pibes pobres de los barrios, los que son víctimas de la exclusión y el gatillo fácil”.
En ese sentido, expresó: “Ahora nos hacen creer que en la Argentina estamos en peligro por el narcotráfico (…) por eso pienso yo que ´narcotraficantes´ seremos nosotros, será un pibe que para no ser víctima de un dealer, planta su plantita en su casa”. Al mismo tiempo, mostró preocupación en la “etiqueta” que en este contexto político tendrán los jóvenes militantes políticos.
Azucena Racosta reflexionó también sobre la situación de la militante de la organización Tupac Amaru detenida: “Hay que recalcar que Milagro Sala está detenida sin causa penal. Esto es gravísimo. Esto nos hace acordar a las detenciones ilegales de la dictadura. (…) Se está hablando como si fuera una gran delincuente y en su causa penal no hay nada para que esté detenida. Comenzaron a investigar cuestiones de corrupción luego de una detención ilegal y en el caso de la figura de tumulto tendría que estar excarcelada”.
“Si hubo compañeros movilizados por otras razones muy justas como el despido de Víctor Hugo, como el arrebato al AFSCA, tenemos que llenar plazas por Milagro (…) Si no la sacamos en libertad, no va a pasar mucho tiempo hasta que estemos todos criminalizados (…) Es el aviso de que aquel que reclame por su trabajo, por la democratización de los medios o por una educación digna será preso sin causa legal que lo establezca”, cerró.
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