Un resultado curioso. Tras 20 años de gobierno republicano, el demócrata Bill De Blasio ganó la elección para alcalde de Nueva York con amplia diferencia.
Raúl Isman, analista internacional y director de Redaccion Popular, analizó dicha situación en Patria Grande Latinoaméricana.
«El candidato De Blasio ganó con el 70% de los votos emitidos, pero en realidad votó poco más del 10% de la población», informó el periodista. «Muy poca gente participa, se vota en martes, día laboral. Mucha gente trabaja a 100 o 200 kilometros de su casa. No vas a hacer 100 kilometros de ida y vuelta para votar. Es un intento de desalentar la participación por parte del poder real», explicó a Gabriel Fernández y Jorge Thierbach.
Aunque fue una diferencia importante, Isman aseguró que «no puede sorprender que en Nueva York gane un sector liberal, no radical, en el modo que se denominan la fuerzas políticas en los Estados Unidos». Asimismo, comentó que «De Blasio es un liberal ligado a las revoluciones populares latinoamericanas. Pasó su luna de miel en Cuba, desafiando la ley norteamericana, es amigo de la revolución sandinista» y debido a eso «va a tener que remar contra un partido muy ligado al establishment, va a tener que lidiar contra una situación muy dificil de revertir. Su promesa es disminuir las inequidades que han dejado cuatro gestiones republicanas».
Teniendo en cuenta la procedencia del Alcalde electo neoyorquino, el director de Redacción Popular se expresó respecto a las internas en los partidos políticas estadounidenses: «en el año 1968 la izquierda del Partido Demócrata ganó la mayoría y fueron ametrallados, los masacraron. Eso habla de la democracia de los partidos en Estados Unidos».
También habló de la vinculación de De Blasi con el presidente Obama: «No habria demasiada desconexión porque a Barack Obama le cortaron las alas cuando llegó a la presidencia. Obama era un dirigente social antes de ser electo senador por Ohio. Caminaba los barrios pobres, distribuía ayuda social, encabezaba reclamos por justicia social». En cambio, una vez «puesto en el gobierno se vio condicionado por el peso asfixiante del poder económico en Estados Unidos».
«El presidente de los Estados Unidos tiene menos autonomía con respecto al poder económico que la presidenta Argentina», aseveró.
Ante la injerencia del poder económico sobre los dirigentes políticos, se le consultó a Isman sobre el poder real que posee De Blasi. Reflexionó:«¿Qué margen tenía Néstor Kirchner cuando con 23% de los votos asumió en 2003 y José Claudio Escribano, por parte de La Nación, lo apretó diciéndole que tenía que hacer esto y lo otro y al otro día el diario publicó que la Argentina había electo presidente para un año?». Por eso, relativizó. «abrámosle un crédito a la política, a la capacidad de iniciativa y a la voluntad política que tenga De Blasio».
Por último, el analista se refirió a la situación actual de la moneda estadounidense, teniendo en cuenta que un diputado propuso en la Duma (Parlamento Ruso) prohibir el dólar. «Solamente los caceroleros argentinos tienen fascinación por el dólar», sentenció. «El dólar es papel picado, se emiten dólares para pagar deuda que se va a tomar a futuro. No hay sustento económico y productivo para la moneda norteamericana».
«El mundo tiene que salir del dólar«, concluyó Isman.
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