El temporal ya pasó. Luego de la suspensión inducida por la Superliga del partido entre Gimnasia y Boca Juniors, quedaron unas interesantes reflexiones del escritor platense Rafael Ton en Abrí la Cancha. En diálogo con Carlos Aira, los ejes de la conversación pasaron por dos preguntas: ¿Son conscientes los socios de los clubes de la avanzada privatizadora que se avecina sobre los clubes? ¿Los socios se animarán a cambiar símbolos identitarios a cambio de promesas de gloria?
«La base del problema es que no se enfocan las mentiras. Hay un libro escrito por Paul Holbach titulado Ensayo sobre los prejuicios donde se explica por qué las mentiras se difunden más rápido que las verdades. Algo de eso existe en este tema. Son pocos los periodistas que dicen en forma clara y contundente una verdad: los gerenciamientos han fracasado. Pero esta realidad la tapan esos ególatras y perseguidores de jugadores llamados periodistas deportivos de grandes medios privados. Esos nunca hablan de lo que significó Argentinos Juniors en Mendoza o jugando en Miami una Supercopa. Tampoco de lo sucedido con Deportivo Mandiyú o Quilmes, cuando fue gerenciado por el Excel Group. Nunca hablan de esos temas«; reflexionó Ton.
La pasión. Motor de los hinchas. La Superliga quiere cambiar los parámetros. Un fútbol espectáculo sin histerias. Rafael Ton – hombre intimamente ligado a la tribuna gimnasista – expresó: «Para estos gerentes, la pasión sólo sirve para vender gorritos de arlequines durante los mundiales. Anhelan el modelo español, de pasión exacerbada en el anuncio de televisión pero todos sentados y desapasionados en las canchas. Si en los clubes elegimos autoridades que no les molesta ser servicio de acompañantes de dos o tres clubes, puede suceder algo terrible. Hay verdades que hinchas de Rosario Central, Huracán, Gimnasia, Sarmiento o Belgrano deben recordar. Porque lo que se viene es todo negocio. Primero le van a decir a los socios que para salir campeón, primero hay que cambiar la camiseta por dinero; luego, cambiar los colores; después, será negocio vender el estadio y construir en un lugar más alejado. Esa bola de nieve se tornará imparable y nunca quedará claro para quién fue el negocio, porque los clubes e hinchas nunca se ven beneficiados«.
¿Se puede quebrar la identidad de un club en nombre del resultado? Para el autor del Síndrome de Doña Florinda, el ejemplo es Boca Juniors: «Todos sabemos lo que significaba la Bombonera cuando casi todo era popular y no tantas plateas. La vieja Bombonera anterior a 1996. Hoy tenés gente que queda afuera del estadio por no tener solvencia económica para ir al partido, cuando su lugar lo está ocupando un inglés que va a sacar fotos. Esos cambios llegaron cuando se aprovecharon los buenos resultados deportivos para cambiar la razón social del club y minimizarlo«; Ton analizó una situación que puede trasladarse a todos los clubes: «Antes, el club era un lugar donde se hacía deporte, donde también estaban las tribunas, las banderas y la expresión popular. Hoy, para mucho colectivo imaginario, es un lugar donde hay un presidente que es bueno si el equipo sale campeón. Cada vez se quiere instalar la idea de menos club y más fútbol«.
«En el fútbol argentino, los clubes chicos son muy grandes. Sin embargo, si comienza a hacerse carne este nuevo esquema de negocios donde hay sólo un par de equipos, todos los clubes terminarán muy mal«; analizó Rafael Ton, quién recordó que Mauricio Macri, apenas asumido presidente de Boca en 1996 dijo que el resto de los clubes se mueran: «Ojalá que no haya una supremacía total de Boca Juniors y River Plate. Habría que apuntar a directivos de Racing Club y San Lorenzo explicándoles que también caerán en la volteada de ser partenaire del negocio»
Director de Argentones, Rafael Ton también dio cuenta del marketing y propaganda sobre los ejemplos de Defensa y Justicia y Talleres de Córdoba: «Nos van a poner esos dos ejemplos como carnada. Por eso nadie habla en los medios sobre quienes están detrás. Defensa y Justicia está ligado a Cristian Bragarnik, hombre de peso en AFA, ligado al Xolos Tijuana. En el caso de Andrés Fassi, presidente de Talleres, es vicepresidente del Grupo Pachuca. ¿A nadie en el periodismo deportivo argentino se le ocurrió preguntar de donde sale las monstruosas cantidades de dinero del fútbol mexicano y su desembarco en Argentina? Salvo muy pocos, nadie se hace esa pequeña pregunta. Los periodistas de los grandes monopolios están atentos en averiguar con que chica está saliendo tal jugador. Todo esto es muy peligroso: lo que se viene es este tipo gerentes disfrazados de manager o representantes. Lamentablemente, mi sentir es pesimista. La gente no está avisada de los peligros que se vienen«.
¿Y el periodismo partidario está a la altura de estos acontecimientos? «Hoy no tenemos medios fuertes. En Gimnasia no tenemos un Néstor Basile con Tribuna Gimnasista, concientizando sobre ciertos temas. Y eso necesario concientizar porque el enemigo es grande y peligroso. Cuando vienen estos sujetos con soluciones mágicas, siempre están los que se prenden, y cuando hay crisis, más gente quiere creer en los gerenciamientos. Encima, los jóvenes que se suman al periodismo están más pendientes de entrevistar al técnico que de la identidad del club. Lo sufrimos con Fercho Dominguez en Ginasiá».
Futbol Mexicano con plan de negocios español. Fútbol e hinchas sin histerias. esto tiene que ver la identidad: «Han utilizado al mal de las barras bravas. Las mismas siguen estando pero son el pretexto para buscando público de tenis para el fútbol. Menos gente, pero que consuma mucho y caro. Que pague el estacionamiento, el pancho y la última camiseta»
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