El fútbol argentino maneja un cóctel explosivo: polémicos arbitrajes, insultos al presidente en los estadios y el deseo manifiesto del ejecutivo nacional de imponer las Sociedades Anónimas Deportivas. El veterano periodista Hugo Lencina analizó en Abrí la Cancha el presente del fútbol argentino y el trasfondo político para comprender lo que viene.
«Al fútbol argentino le pasan muchas cosas juntas y todas malas. Es un reflejo de lo que le sucede al país«; analizó Lencina, quién agregó: «La reunión entre Mauricio Macri y Guillermo Barros Schelloto es inoportuna. Invitarlo después de lo que se está viendo, de los cantos contra el Presidente en canchas de River y San Lorenzo, sumado a una serie de malos arbitrajes y contingencias demasiado favorables a Boca Juniors, es inoportuna»
Consultado por Carlos Aira sobre el ingreso de las Sociedades Anónimas Deportivas al fútbol argentino, Lencina recordó que es un viejo anhelo del ex presidente xeneize: «Macri ya fracasó con Deportivo Español queriéndolo llevar a Mar del Plata. Año 1993. Años después, como presidente de Boca, llevó el tema a AFA y perdió mediante una votación en la que se votó el sólo. En esta búsqueda de todo el negocio, en donde todo es mercado, también se busca el negocio del fútbol. El fútbol, junto con la compra de obras de arte y los grandes hoteles, son los centros de mayor lavado de dinero en el mundo«.
Ante una posible negativa de los socios, Lencina analizó: «Van a intentar seguir avasallando a los clubes. Este gobierno, no solo Macri, está acostumbrado a avanzar porque son gente que viene del mundo empresarial. Tienen una formación cultural en la cual las empresas nunca retroceden, siempre avanzan. Si ven que no pueden seguir avanzando, tratan de negociar. A veces ganan y otras pierden. Creo que van a tratar de avanzar y también que fracasarán porque está demasiado arraigado en los socios de los clubes el sentido de pertenencia de las viejas sociedades civiles sin fines de lucro. Así lo marca la cultura, el acervo, el sentimiento, la pertenencia y todo lo que el club representa para los argentinos. Sudamérica tiene la particularidad, sobre todo Argentina, que los clubes son focos de movimientos civiles. Esto no pasa en Europa ya que, por ejemplo, la mayoría de los grandes son Sociedades Anónimas»
El Negro también se refirió a la renuncia del Sub-Secretario General de la Presidencia Diaz Guilligan: «Renunció porque era Sub-Secretario. Si fuera Ministro no renuncia. Es miembro de la Comisión Directiva de River Plate y la plata que tenía era asociada a Paco Casal por la compra y venta de jugadores«; y realizó una consideración en el marco del tratamiento mediático del periodismo deportivo al caso: «Miramos quienes mueven la pelota pero no quienes son los verdaderos dueños de la pelota. Estamos muy metidos en el mundo de la pelota«.
«Hace poco estuvo en Argentina Javier Tebas, presidente de la Liga Española de Fútbol, quién vino – muy bien pago – a traer negocios. Me parece bien que firme contrato con Mariano Elizondo, presidente de la Superliga, pero no solo firmó ese contrato, sino también firmó un convenio con el ministerio de Seguridad. ¿En que consta? En que otra vez van a poner equipos de seguridad en Argentina. Cuando se quiso traer por primera vez, Macri y Fernando Miele, entonces presidente de San Lorenzo, pagaron más de un millón de dólares por cada equipo cuando Vélez Sársfield y River Plate abonaron 400.000«, dijo el periodista en relación a las visitas del español Tebas.
Para Lencina, Rodolfo D´Onofrio es un personaje que genera inquietud al gobierno de Mauricio Macri: «Es un hombre que le está produciendo mucho escozor al gobierno. Se hicieron dos mediciones sobre D´Onofrio. Una porque él pidió hacerse una medición como figura de carácter popular, y al saber eso, inmediatamente la Agencia de Informaciones del Estado hizo una medición por su cuenta, que midió muy bien. Eso molestó al gobierno«.
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