River se llevó un triunfo enrome de la Bombonera y terminó de abrir la lucha por el campeonato a falta de seis fechas. No fue más grave para Boca porque Newell’s a su vez perdió el clásico rosarino, pero a tres puntos acecha un San Lorenzo en alza, y Banfield otra vez encontró la senda ganadora.
Sin regalos
La fecha de clásicos del transición 2016 había arrojado muchos empates en 0. La expectativa previa de esta oportunidad chocaba con el recuerdo de la seguidillas de empates sin goles del domingo 24 de abril de 2016. Afortunadamente no fue el caso de este fin de semana. No abundaron los goles, pero de doce partidos jugados hasta solo tres fueron empates. Y en los que uno u otro equipo se impuso nadie regaló casi nada.
Ajustarse al libreto
Los clásicos de La Plata y de Boedo-Parque Patricios tuvieron semejanzas. Ambos terminaron 1 a 0 a favor de Estudiantes y de San Lorenzo respectivamente. Pincharratas y cuervos fueron compactos, golpearon y luego controlaron sin problemas defensivos la desesperación de su rival, sin intentar nada pretencioso y jugando con el objetivo claro. Incluso Estudiantes no tuvo que soportar un asedio como el que ejerció Huracán sobre el área del Ciclón durante el primer tiempo y el comienzo del segundo. Luego del gol, triperos y quemeros pusieron voluntad pero les faltó claridad e ideas en la ofensiva para dar vuelta la historia.
Tiempo de revancha
Rosario Central, River e Independiente festejaron el domingo. Los tres habían perdido contra sus clásicos rivales en la primera mitad del torneo y lograron victorias inobjetables el domingo.
En primer término los canallas volvieron a mostrar las debilidades defensivas de su clásico rival que otra vez, como contra los diablos rojos hace una semana, no pudo sobreponerse a una desventaja temprana. Cabe recordar que buena parte del éxito de Newell’s se basó hasta el momento en asegurar el 0 en el arco propio y luego lastimar. Esta vez la fórmula se vio desbaratada por la movilidad del ataque auriazul, especialmente de Teófilo Gutiérrez, Marco Ruben y Federico Pachi Carrizo. Los canallas se fueron con la ventaja de dos goles al descanso, controlaron sin grandes sobresaltos el segundo tiempo y disiparon rápido el suspenso cuando Germán Herrera marcó el tercer gol, muy poco después del descuento de Mauro Formica.
River por su parte corrigió errores y repitió virtudes respecto al clásico pasado. De nuevo aprovechó los horrores defensivos de Boca, pero esta vez no cometió las fallas en el fondo que había perpetrado en la derrota por 4 a 2. Fue contundente cuando el partido le era ampliamente favorable, la ofensiva no descansó en una sola individualidad y liquidó el partido cuando tuvo la oportunidad. Además los cambios de Marcelo Gallardo (dos de ellos forzosos por las lesiones de Milton Casco y de Gonzalo «Pity» Martínez) fueron mucho más efectivos que los de Guillermo Barros Schelotto, que también se vio forzado a remplazar tempranamente a Ricardo Centurión, pero al igual que el Muñeco dejó mal armado a su equipo. Asimismo Boca como dijimos padeció en la última línea (nuevamente Santiago Vergini y Gino Peruzzi jugaron un clásico olvidable) pero esta vez no hubo poder ofensivo que lo salve.
Independiente enfrentó en el último turno a Racing, con dos años de buenos antecedentes para la Academia detrás. El equipo de Diego Cocca llegó disminuido por las ausencias de Marcos Acuña (lesionado) y Lautaro Martínez (convocado a la selección juvenil sub-20) pero se las arregló para plantear un trámite parejo en el primer tiempo. Era una pulseada dura, pero los dirigidos por Ariel Holan consiguieron quebrar el partido en el segundo tiempo. Emiliano Rigoni abrió la cuenta de tiro libre (con una ayudita de Agustín Orión) y Racing fue mermando sus fuerzas, para que sobre el cierre Maximiliano Meza cerrara la cuenta con un golazo de jugada personal.
El próximo fin de semana Boca recibirá a Newell’s, pero en un escenario completamente distinto al que muchos imaginábamos. San Lorenzo, River y Banfield mientras tanto buscarán sus tres puntos a la espera de un empate entre leprosos y xeneizes.
Trabajo de hormiga
Banfield también fue uno de los grandes beneficiados de la fecha, porque con su triunfo frente a Lanús (ante el cual había sufrido una derrota dolorosa hace apenas un mes y medio. El equipo de Julio César Falcioni parecía fuera de todo tras ganar dos y perder cuatro de sus seis primeros partidos del año. Sin embargo el sábado logró no solo una esperada victoria en el clásico (no vencía a Lanús desde septiembre de 2015) sino que sumó su cuarto triunfo consecutivo y nuevamente está en puestos de clasificación a la Copa Libertadores de 2018. ¿ Y quién le quita el derecho a soñar con sumarse a la lucha por el título?
El otro partido que afectaba la lucha de arriba era Colón vs. Unión, el clásico santafesino, y el único que salió empatado. También compartió con los demás la lucha cerrada. Llegaban mucho mejor los sabaleros pero los tatengues se las ingeniaron para complicarlos y robarles un punto de visitante. Ahora los dirigidos por Eduardo Domínguez perdieron terreno pero siguen expectantes por la derrota del líder del campeonato.
Otras luchas
El clásico cuyano favoreció a Godoy Cruz, que se impuso por 2 a 1 con claridad sobre San Martín de San Juan. Para los bodegueros sirvió sumar otros tres puntos y quedar a cinco de la zona de clasificación a la Copa Sudamericana, mientras que los sanjuaninos ven cómo su promedio no se consolida y eso significa que probablemente peleen por la permanencia en la próxima temporada.
Lo mismo sucede con Belgrano de Córdoba que volvió a repartir puntos con Talleres, en un partido entretenido. Nuevamente no pudieron sacarse ventajas, pero quedó la polémica por la no expulsión de Juan Cruz Komar. El defensor había agarrado claramente de la camiseta al delantero Matías Suárez (autor del gol pirata) cuando éste se iba rumbo al segundo gol, y cuando Komar era el último hombre. Fuera de eso el punto no le sirvió mucho a ninguno de los dos. Talleres entró en un tiempo de retracción (sumó dos de los últimos nueve puntos) aunque sigue cerca de la zona de clasificación a Copa Sudamericana, mientras que Belgrano apenas maquilló su mala campaña.
Por último los clásicos que afectan a la pelea por el descenso favorecieron en primer lugar a Olimpo, que sumó tres puntos de oro ante un Aldosivi que se despeña barranca abajo y enfrentará a los cinco grandes en las próximas fechas. Patronato y Sarmiento empataron y el punto no le cayó bien a nadie. A los locales porque no suman de a tres hace nueve fechas, y a la visita porque solo le sirve ganar para abrigar esperanzas de permanencia.
También ganó Atlético de Rafaela ante Altético de Tucumán, y logró una victoria que lo pone a tres puntos de Arsenal y a solo uno de Quilmes. Precisamente los del Viaducto juegan hoy contra Temperley en Sarandí, y los cerveceros visitarán a Defensa y Justicia. Habrá que ver si Arsenal y Quilmes logran algún tipo de mejoría futbolística, si los gasoleros asimilan la goleada en el Monumental hace una semana, y si la histórica eliminación de San Pablo en el Morumbí no desconcentra a este sorprendente Halcón de Varela.
La fecha la cerrará Vélez en Liniers ante Tigre, ambos con la necesidad de sumar para que la lucha por la permanencia no sea una carga en el futuro cercano.
MG/GF/RG