En comunicación con Feos, Sucios y Malas, el ex ministro de economía durante la administración de la Alianza, criticó el presupuesto recientemente aprobado y comparó su plan económico con la política actual. Para él, solo cambiaron las circunstancias internacionales.
Ricardo López Murphy, ex ministro de economía en el gobierno de Fernando De la Rúa, criticó el presupuesto para el año entrante recientemente aprobado en el Parlamento. “Es un presupuesto que ni los oficialistas ni los opositores creen que se vaya a cumplir”, disparó. Reprochó también el “ejercicio de la facultad de superpoderes”, al señalar que “es uno de los grandes problemas de estos diez años”.
Consultado por qué la economía se mantiene ordenada a pesar de la crisis en los países centrales, López Murphy contestó que “los países con los que estamos vinculados no tuvieron ninguna crisis, que son los del Sudeste Asiático”, y elogió el rol del empresariado: “Tenemos el mejor empresariado agrícola del mundo”, a quiénes señaló como “una ventaja competitiva” aún con “impuestos extraordinarios” a las exportaciones.
Al momento de referirse a su pasado como ministro de economía en el gobierno de la Alianza que terminara en 2001 con una crisis económica, política y social terminal, López Murphy explicó su actuación con una metáfora: “Teníamos una herida pequeña en el dedo gordo del pie, se gangrenó la pierna y tuvimos que amputarla”. Según el ex ministro, “el programa de 2001 era tener una política inteligente para evitar la crisis que finalmente hubo” y la “mutilación” se debió a que su gobierno “no logró convocar el apoyo político necesario” para imponer su plan económico.
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