Leopoldo Jacinto Luque, ex jugador de fútbol y campeón en el Mundial de 1978, analizó en el aire de Radio Gráfica lo que dejó el torneo y cómo puede ser el futuro del equipo nacional.
En diálogo con Abrí la cancha Luque observó: “lo que sucedió en los partidos con Brasil y con Chile sirvió para que algunos jugadores se dieran cuenta de que se puede, aunque no hay que dormirse. El fútbol es para estar siempre alerta para que el jugador contrario no pueda explotar la falla que uno puede tener. Me gustó lo que hizo Argentina y la actitud de Messi”.
El ex jugador también sostuvo, en relación a los arbitrajes y al uso de la tecnología en los partidos, que “los árbitros deberían tener en cuenta los antecedentes de conducta de los jugadores. Si no estamos a expensas de que un grupo de vivos haga cosas como poner a un matón prepotente como Gary Medel a provocar al mejor de la cancha. Es algo viejo, que uno se haga expulsar y se lleve al mejor del equipo contrario. Debería haber sido amonestación para ambos, o amarilla para Messi y roja para Medel. A Argentina contra Brasil le robaron dos penales. ¿Para qué pusieron el VAR si no lo van a mirar? Los verdaderos protagonistas de un partido de fútbol son los jugadores. El árbitro tiene que pasar desapercibido. Para el uso del VAR debería reglamentarse que el capitán o los jugadores de un equipo puedan pedirlo, no usarlo cuando se le antoja al árbitro, porque entonces estamos peor que antes. Eso lo podrían arreglar los jugadores si se unieran un poco”.
Finalmente Luque opinó respecto al futuro del seleccionado y al posible próximo entrenador que “es hora de ponerse de acuerdo en qué proyecto de fútbol tiene la AFA y a partir de ahí quién lo puede llevar a cabo. Argentina necesita un técnico que practique su fútbol típico. Los dos candidatos que me gustan, y hasta los pondría a uno de entrenador y al otro de ayudante, son el Chacho Coudet y el Muñeco Gallardo, porque practican el fútbol típico del Río de la Plata. Messi dijo antes de esta copa que estábamos para tercer o cuarto puesto. Los pibes nuevos demostraron que pueden. El técnico tiene que ser una persona que convenza a los jugadores, que tenga varios ayudantes que puedan tomar su lugar cuando se vaya, con años de laburo. Ser técnico no es cuestión de retirarse como jugador y presentar un proyecto. Hay que prepararse”.
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