Claudio Morresi, ex secretario de Deportes de la Nación, criticó duramente el DNU 92/2019 que degrada la secretaría de Deportes a una Agencia. Pidió a legisladores de ambas cámaras del Congreso que «no aprueben un proyecto que condene al deporte argentino«.
Entrevistado por Pablo Abbatángelo en Dame Pelota, Morresi expresó: «La historia del deporte argentino señala que cada medida discutida por la comunidad deportiva, y luego llevada a ambas cámaras del Congreso fue beneficiosa. Como ejemplo, las leyes del ENARD y Clubes de Barrio y Pueblo. El presidente de la Nación firmó un decreto sin necesidad ni urgencia. Detrás de su firma está la desfinanciación del deporte argentino y la venta de tierras públicas pertenecientes a la secretaría de Deportes»
Morresi señaló que son tiempos «de resistencia y movilización. El deporte le está diciendo no al DNU y será la bicameral quien deba poner freno a éste avasallamiento».
«Pocas veces existió unanimidad de acción y concepción dentro del deporte. Diversos sectores, como la Confederación Argentina de Deportes, la Confederación de Clubes o el Comité Olímpico Argentino tuvieron distintas posiciones. Pero ante éste DNU, salvo la posición ambigua del Comité Olímpico, todos los actores pedimos que se rechace el DNU y se discuta una ley beneficiosa«, expresó Morresi a Radio Gráfica.
Para el ex secretario de Deportes, el DNU es una manera que tiene el gobierno nacional de financiarse a través del deporte: «En 2009, con la ley del ENARD, el ente autárquico recibía el 1% del valor de los mensajes de texto de la telefonía celular. Esto ingresaba al ENARD, ente mixto secretaría de Deportes-Comité Olímpico Argentino. Este dinero repercutía directamente en necesidades del deporte, como becas, viajes y equipamento deportivo. El decreto hace que ese dinero vaya, directamente, hacia el gobierno. Tiene su razón: las medidas que tomó obligan a pagar deuda y sus intereses. Allí va el dinero del deporte argentino«.
Recordemos que en éste 2019, el presupuesto hacia la Secretaría de Deportes pasó de $2.600.000.000 a $900.000.000.
«El gobierno nos quiere meter en una trampa. Quiere que discutamos una ley mientras el DNU está en plena vigencia. Esa es nuestra espada de Damocles. Por eso las organizaciones del deporte debemos tomar la bandera de lucha y rechazar este DNU«; concluyó Morresi.
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