junio 08, 2025

Clubes de Barrio | A un paso del abismo

Clubes de Barrio |  A un paso del abismo

Un país para pocos. En eso se está convirtiendo la Argentina de Cambiemos. Las últimas semanas han sido inquietantes: la disparada del dólar trajo aparejadas nuevas sumas para los ya castigados bolsillos. Ante éste panorama sombrío, ¿Cual es el futuro de los clubes de barrio en nuestro país? 

En Abrí la Cancha entrevistaron al periodista Osvaldo Jara, seguramente quién más sepa de la problemática de los clubes de barrio en nuestro país, quién trazó un panorama oscuro: «La realidad del país oscurece el panorama. Las políticas que lleva adelante el gobierno de Cambiemos pegan duro en todos los sectores del país y el deporte de base no está ajeno. Es más, es muy vulnerable a la situación actual».

Jara explicó que durante el último gobierno popular se llevaron políticas que paliaron las dificultades de los clubes de barrio, y que tan sólo la Municipalidad de Avellaneda hoy lleva adelante políticas para el sector: «El programa Alentar, que se inició en 2010, sigue vigente en Avellaneda. El mismo saldó cuentas en cuanto a infraestructura y demandas de los pibes que necesitaban un lugar para entrenar o divertirse. Fue una política estatal que los municipios bajaban a sus localidades»

Agregó: «Los clubes están en una situación muy difícil. Los tarifazos afectan de manera crítica. El transporte que lleva a los pibes a practicar deporte también aumenta. Lo mismo pasa con la economía familiar en hogares donde han caído por debajo de la línea de pobreza y tal vez el club sea el único sustento para un alimento diario. Pienso en clubes de barrios humildes y pobres. Allí el contexto es muy difícil. Cuando hablamos de clubes tenemos que verlos desde una mirada global; teniendo en cuenta que junto al club se deteriora un barrio y familias enteras«

Dos de las grandes deudas del último gobierno popular con el deporte de base fue la implementación de la Ley de Asignación Universal del Deporte y la reglamentación de la Ley del Deporte. Ambas herramientas fundamentales para integrar una alianza Estado-Clubes-Familias.

Osvaldo Jara analizó: «La AUD fue votada y reglamentada a fines de 2015. Debería estar en funcionamiento porque es una ley que haría que dos millones y medio de pibes puedan practicar deportes en los clubes. Pero la misma nunca fue financiada»; También dio cuenta de la complejidad de la Ley del Deporte: «Fue creada en 1974 a instancias del General Perón. Fue la síntesis de la cultura peronista del deporte que se desarrolló en su primer y segundo gobierno. Entre los puntos fundamentales tenía el Consejo Nacional del Deporte (CONADE), en donde todos los actores del arco deportivo decidían en conjunto las políticas nacionales. No fue reglamentada hasta 1989 y después fue cumplida parcialmente hasta los gobiernos de Néstor y Cristina donde llegó la actualización de la Ley. Contempla algunos puntos importantes entre los que se encontraba la democratización de las comisiones directivas de las principales organizaciones del deporte como el Comité Olímpico Argentino. En esta ley se contemplaba al club de barrio como una institución social fundamental para la comunidad. A esto hay que relacionarlo con la ley 27.098, de Régimen de Promoción de clubes de Barrio y de Pueblo. Uno de los puntos fundamentales de la Ley 27.098 se basa en los subsidios en los servicios, tarifa social, que haría que por ejemplo no lleguen tarifazos de luz, agua y gas, en lo que hay clubes que tienen 500% de aumento si lo comparamos con 2015. Esta ley también contempla la creación de un registro nacional de clubes, que es una histórica deuda pendiente que tenemos desde el peronismo. Este registro sería muy importante para que cada club pueda tener un asesoramiento legal y jurídico y para que pueda ser instituido legalmente. A los clubes no se les puede pedir balances, papeles, los tenes que ir a socorrer porque son células básicas de una comunidad. Esto haría que puedan estar registrados y por lo tanto tener los papeles al día, balances al día. En 2014/2015 se produjo un pedido de amnistía administrativa lo que implicaba que estos clubes puedan ajustarse legalmente, sean registrados y tengan personería jurídica. Este trabajo lo viene haciendo la Unión Nacional de Clubes de Barrio, pero se necesita que el estado este presente y apoye. Esto haría que hoy se pudiera sortear la trampa de la Secretaría de Deporte que había instaurado una especie de registro por internet, cuando hay clubes que no manejan el servicio porque no pueden. Los pocos clubes que pudieron acceder, cuentan que fue mucho menos de lo que se prometió”.

Consultado por Carlos Aira sobre el marco político de cara a 2019, el autor de «Peronismo y Deporte» explicó: “Estoy convencido que si queremos derrotar a este gobierno que tiene como aliado al capital financiero y las corporaciones mediáticas tenemos que confluir con distintas fuerzas hacia una unidad en defensa de los intereses del pueblo. Hace unas semanas estuve en un plenario que se realizó en Ensenada y con mucha alegría pude ver diferentes generaciones debatiendo. Creo que ese es el camino y no tengo ninguna duda que así volverá un gobierno nacional, popular y democrático». 

Finalmente, Jara detalló las medidas que debiera tomar un gobierno popular: Las herramientas están, que son la Ley del Deporte actualizada, la Ley de Clubes de Barrio que necesita ser reglamentada. Hay que fortalecer los clubes y hacer cumplir la Ley. Si hubo una característica a partir del 2003, fue que la participación popular hizo realidad muchos proyectos que durante años estaban inconclusos. Si hay algo que es característico de la cultura peronista del deporte es la participación plena que no tenga que ver con un dirigente que dirija los hilos de una política deportiva sino que tiene que ser de manera amplia y democrática, aprendiendo de errores propios y de alguna manera poder pensar que estamos en un momento clave donde los derechos sociales de la mayoría tienen que volver a ser reivindicados como por ejemplo la actividad física, el deporte, la recreación que desde siempre es uno de los valores de la justicia social. A partir de estas herramientas tenemos ir avanzando hacia una participación popular y democrática. Es la única manera de garantizar que sea una política de la mayoría de los argentinos”.

FV/GF/RG

Comentarios

comentarios

Artículos ralacionados