El periodista Diego Morris, intimamente ligado a los últimos veinte años del Racing Club, estuvo en Abrí la Cancha. Junto a Carlos Aira y Federico Visser analizaron la actualidad del fútbol argentino.
Para Morris, «Guillermo Barros Schelotto tiene buenas intenciones pero me confunde«; y explicó las razones: «El tenía una manera de jugar. En su momento dejó a Lanús en lo mas alto, ganando una Copa Sudamericana. Eso sucedió porque tenía todos los actores adecuados para ese sistema. En Boca comenzó con ese mismo esquema 4-3-3, pero la ubicación de Carlos Tévez le complicaba la vida. No sabía donde ponerlo. Cuando los resultados no llegaron, cambió el sistema. Por eso digo que a veces me confunde».
Morris ponderó el trabajo de Ariel Holan en Independiente: «Tiene un poder de convencimiento muy importante. Hace poco hablé con Mariano Bareiro, ex dirigido suyo en Defensa, quién me afirmó que le enseñó infinidad de cosas productivas. Por eso cuando el entrenador le anticipa al jugador lo que sucederá en el partido, y eso pasa, el jugador se convence que el entrenador sabe de verdad y confía plenamente en su idea de juego. Eso sucede en Independiente».
Conocedor del día a día del Racing Club, Diego Morris afirma que Lautaro Martínez es uno de los proyectos más importantes del fútbol argentino: «Es un crack que todavía se pasa de revoluciones»; pero pronto se metió en el debate que mas le gusta: ¿A que llamamos jugar bien en Argentina? “Si es un equipo de tenencia y sabes atacar usando tus laterales, jugás bien. En Argentina se piensa muy poco. En un plantel tenés que tener jugadores de diversas características. Hay entrenadores que prefieron jugar con tres arriba y no tener delanteros por afuera. A mi entender nunca podes jugar así. Cuando un equipo sale a empatar generalmente pierde. Cuando te ocupás de lo que hace el rival y no de lo que hace tu propio equipo, estás en un problema. Si salís a atacar le generás preocupación al rival. En el fútbol argentino se corre mucho y se piensa poco. Es muy intenso, pero no sé si se juega tan bien. Si se jugara bien, ¿Por que no hay un equipo que se destaque un año entero?»
Finalmente, y a pedido de Gabriel Fernández, Morris trazó un semblante de Gimnasia y Esgrima La Plata: «necesita cambiar el paradigma. Ellos mismos piensan que todo sale mal, que es un club con mala suerte, que están salados. Tienen que empezar a ver la historia buena de Gimnasia, que sin dudas las hay. El pensamiento malo siempre transmite cosas negativas. Después de Carlos Griguol, el club equivocó el camino. Tenía que seguir con esa línea».
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