
Esteban Simonetta, delegado de los trabajadores de Línea 60, señaló en Punto de Partida que la medida de fuerza comenzada en la tarde del jueves se debe a reclamos por mejores medidas de seguridad
«Esto lleva años de denuncias y distintos conflictos por falta de inversión, también por el mal uso de los subsidios en materia de seguridad en los puestos de trabajo y de servicio. A esto se le suma la muerte de nuestro compañero David Ramallo en septiembre del año pasado por negligencia de la empresa», indicó.
En diálogo con Lucas Molinari, aclaró que «todas las inspecciones de los organismos de control que tuvo la empresa en este tiempo encontraron muchas falencias y, sin embargo, no hubo ninguna solución» por parte de la empresa MONSA. «No queremos que la muerte de nuestro compañero quede en vano», ratificó.
«Luego de la inspección de ayer jueveshicimos la denuncia en el Ministerio de Trabajo y decretamos la medida de fuerza», afirmó Simonetta.
Actualmente la comisión interna de choferes de Línea 60 está «esperando que el Ministerio se digne a dialogar para que la empresa haga un cambio de adecuación y que cumpla con lo que venimos exigiendo». En ese sentido añadió como reclamo el hecho de que «hay deficiencias en todos los puestos de trabajo como problemas eléctricos, pisos rotos, techos se caen. No hay chequeo de la situación de cada trabajador».
«La empresa paga multas pero no solucionan los problemas que tienen», denunció.
Simonetta anunció que «el paro es total y por tiempo indeterminado» y argumentó que «los trabajadores están abiertos al diálogo. Estamos esperando que la empresa comience a solucionar cada uno de los puntos planteados para terminar con esta conflictividad».
En cuanto a la represión que sufrieron los trabajadores de la planta Pepsico Snacks de Florida, el delegado admitió que le «da mucha pena ver como se pierden tantas fuentes de trabajo y que no haya políticas de Estado para solucionar el conflicto. Esperemos que no siga pasando».
CC / GF / RG