Es verdad. Nuestra columna semanal no brilla por la originalidad de su título, pero las polémicas en algunos partidos obligan a recordar las estrofas de Enrique S. Discépolo. Por lo pronto se viene la fecha de los clásicos y Boca mantiene el liderazgo gracias a que si bien dividió puntos ninguno de sus perseguidores más cercanos sumó de a 3.
Bajo la lupa
El partido del sábado entre Estudiantes y Boca se comentará por bastante tiempo. Desde la previa hasta el post partido tuvo situaciones cuando menos opinables. Comenzó con la discusión por el horario. No podía jugarse el sábado porque los platenses tenían tres jugadores convocados a la selección sub-20 (Santiago Ascasíbar, Lucas Rodríguez y Juan Foyth), que el mismo día partía rumbo a Vietnam, donde hará una gira previa al mundial de Corea del Sur. Durante el partido mismo el árbitro Silvio Trucco no cobró un penal evidente para cada equipo en el primer tiempo (lo cual motivó la airada protesta de Nelson Vivas, quien se arrancó la camisa). Y finalizado el mismo otros dos sucesos: el cinematográfico traslado en helicóptero de los juveniles a Ezeiza, y la falta de control antidóping por razones no totalmente aclaradas, ni siquiera a través de alguna clase de explicación por parte de AFA. No vamos a abonar teorías conspirativas desde este espacio, pero se trata sin duda de desprolijidades demasiado notables para una recién estrenada conducción del fútbol argentino que venía a poner orden y seriedad.
El partido en sí mismo dejó como saldo a unos pincharratas que no puede superar su actual meseta, dado que este fue su cuarto empate consecutivo, y unos xeneizes a los que les cuesta mucho el trámite cuando es cerrado. Más aún, en los primeros minutos salió mejor el visitante, pero con el correr de los minutos terminó desdibujándose. En la jerga del boxeo se diría que las tarjetas mostraron mejor a Estudiantes al final.
También hubo algo de polémica en el encuentro entre el escolta Newell’s e Independiente, a raíz de la patada de Emanuel Gigliotti sobre Mauro Formica que bien podría haberle valido la expulsión. El árbitro Fernando Espinoza decicidió amonestar al delantero que convirtió el tercer y cuarto gol de los diablos rojos. En el momento de la infracción el partido estaba 2 a 1 en favor de los de Avellaneda, pero el local aún estaba en partido dado lo exigua de la diferencia en el marcador. Pero no hay que dejar de decir tampoco que Independiente volvió a mostrar lo cómodo que se siente de visitante (el de ayer fue el cuarto partido consecutivo ganado en esa condición), planteando los partidos de contragolpe y logró meterle cuatro goles a una de las defensas más sólidas del campeonato.
Silbando bajito
La otra gran polémica de la fecha se dio en un partido al que los flashes de la prensa le apuntaron mucho menos. El domingo por la tarde Arsenal recibió a Olimpo en Sarandí, en un partido decisivo en la lucha por no descender. Ambos equipos arrancaban a jugar en zona de descenso y el empate no favorecía a ninguno de los dos a pesar de la derrota de Quilmes ante San Martín de San Juan. Un triunfo de alguno de los dos equipos le hubiera permitido al ganador salir de la zona condenatoria. Sin embargo tras el primer tiempo, que terminó 0 a 0, se decidició la suspensión del encuentro a causa de las condiciones climáticas. El domingo fue un día lluvioso en Buenos Aires y sus alrededores pero a la hora del encuentro en el Viaducto la lluvia no era tan intensa como para interrumpir el cotejo, más aún teniendo en cuenta que otros partidos se han jugado bajo verdaderos diluvios. Aún así, el árbitro Gabriel Paletta decidió que los restantes 45 minutos se jueguen otro día, y dio la imagen de ser particularmente suscenptible, dado el precedente de la fecha anterior, cuando amagó con suspender Huracán-Newell’s por los cantos en su contra.
Ahora bien, si hay un árbitro influenciable debe haber también ifluenciadores, y estos podrían haber sido los dirigentes de Arsenal y Olimpo. El partido no puede completarse esta semana porque los dirigidos por Humberto Grondona enfrentarán en la semana a Juan Aurich, en un partido por la Copa Sudamericana. ¿Cuando debería reanudarse el partido entonces? La lógica indica que será cuando Olimpo vuelva a jugar un partido en el área metropolitana de Buenos Aires, pero eso recién sucederá dentro de cinco fechas, cuando los aurinegros visiten a Independiente. Es decir, según cómo se den sus resultados y los de otros equipos que pelean por mantener la categoría, Arsenal y Olimpo pueden especular y pactar un empate si acaso les conviene dentro de cinco fines de semana. ¿Habrá alguna reacción de parte de sus competidores en la carrera por la permanencia?
Amagues abajo del aro
Además de los partidos polémicos, el resto de la fecha mostró a algunos equipos que como pivoteadores de básquet rondan la punta del campeonato, pero aún no logran prenderse, o volver a prenderse, por completo. San Lorenzo consiguió una nueva victoria, esta vez ante Rosario Central, y muestra una mejoría general que se suma a sus victorias en la Copa Libertadores. Llega bien al clásico con Huracán, pero ¿tendrá resto para descontarle seis puntos a Boca? También Racing volvió al triunfo y más importante aún a la solidez defensiva. La Academia no mantenía el arco en cero desde marzo, cuando venció a Lanús en la reanudación del campeonato. Lo sufrió Gimnasia, que recibe pocos goles pero convierte menos. En sus últimos tres encuentros el Lobo perdió por la mínima diferencia y se aleja incluso de la pelea por entrar a la Copa Sudamericana.
River por su parte encontró la contundencia que le faltó ante Sarmiento hace dos semanas. El primer tiempo ante Temperley terminó 1 a 1. Tras ponerse en ventaja a través de otro gol de Lucas Alario volvieron a verse las dudas que tienen los millonarios en el fondo. Presión de los gasoleros, un lateral que queda expuesto, y la entrada de Christian Chimino que pone el empate apenas cinco minutos después de la apertura del marcador por parte del local. Parecía historia repetida pero en el complemento un penal convertido por Alario y un gol de Sebastián Driussi trajeron tranquilidad. De yapa Camilo Mayada convirtió el cuarto gol. Temperley sufrió un golpe duro cuando venía embalado sumando de a tres y empezando a alejarse de la zona de descenso, mientras que River llega entonado al clásico, aunque debe un partido ante Atlético Tucumán y aún en caso de vencer en la Bombonera va a quedar a cuatro puntos del líder.
Por último, Colón de Santa Fe no pudo sumar de a tres ante los mencionados tucumanos. En un partido entretenido el Decano sorprendió temprano a través de su goleador Fernando Zampedri, que rompió un récord de varias vallas invictas de Jorge «Fatura» Broun. Empataron los sabaleros al final del primer tiempo por intermedio de Ismael Blanco y en el segundo tiempo ambos equipos intercambiaron golpe por golpe, aún cuando Atlético Tucumán se quedó con diez hombres al ser expulsado Guillermo Acosta por doble amonestación. En inferioridad numérica el equipo de Pablo Lavallén se volvió a poner arriba en el marcador, pero en tiempo de descuento Iván Torres selló el empate. Por los números el saldo fue negativo para Colón, por el espaldarazo anímico para pelear el resultado hasta el final fue positivo, y el estado anímico es fundamental cuando se avecina un nuevo clásico ante Unión.
En busca de la salvación
Huracán emerge por el momento como el gran ganador de la fecha, más allá de la irregularidad entre Arsenal y Olimpo a la que nos referimos líneas arriba. El triunfo del Globo ante Aldosivi en Mar del Plara fue vital para cortar su mala racha de partidos sin ganar y aumentar la de su rival, que no solo sumó su sexta derrota consecutiva, sino que en esta recta final del campeonato encara dos clásicos ante el equipo de Bahía Blanca en la próxima fecha y en la última. En el medio se medirá ante San Lorenzo, Independiente, Racing, Boca y River. No solo es durísimo el fixture, sino que los marplatenses mostraron el domingo gravísimos problemas defensivos.
Quilmes y Temperley fueron derrotados como ya se dijo, pero aún permanecen fuera de la zona de descenso. De todas formas la derrota de los cerveceros es dura desde el aspecto moral, dado que cuando parecía que rescataban un punto de su visita a San Juan recibieron el gol de la derrota en tiempo de descuento. Y Atlético Rafaela silenciosamente redondea la mejor campaña desde el Transición 2014, el torneo más viejo de los que se computan para calcular el promedio. Ahora le ganó 3 a 0 a Unión, y si bien sus chances matemáticas de salvarse siguen siendo aparentemente imposibles, los resultados positivos continúan.
Esta noche el cuadro de situación va a completarse cuando 20:10 Banfield reciba a Sarmineto en el Florencio Sola, y cuando a las 21:15 Vélez haga lo propio en el José Amalfitani con Belgrano de Córdoba.
La mesa está servida, el fin de semana que viene se juega la fecha de los clásicos.
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