Balean a tres militantes en Rosario

Fernando Rosúa, dirigente del Movimiento Evita de la Ciudad de Rosario, habló con el programa Abramos la Boca.

En diálogo con Alicia Lado, Mauro Cavallín y José Acuña, Rosúa relató que el jueves pasado por la tarde comenzó en el Barrio Nueva Alberdi de la zona norte de Rosario “un movimiento de los grupos ‘narcos’ de la zona, con ostentación de armas en la calle”.
Cuando el personal del Comando Radioeléctrico de la Policía rosarina, que había sido llamado por los vecinos, se retiró del lugar, “llegó un grupo de otra banda y empezaron a los tiros”, afirmó Rosúa.
“En el medio de la balacera quedaron los vecinos que estaban en la calle. Resultaron heridos tres compañeros nuestros del Movimiento Evita, uno de ellos con una herida en la carótida quien se encuentra en estado delicado de salud”, aseguró el dirigente.
Los otros dos militantes también fueron heridos, “uno con una bala en una pierna y el otro con una bala en la espalda, quienes se encuentran fuera de peligro”, aseveró Rosúa.
“Desde hace un par de años Rosario es tierra de nadie”, disparó el dirigente del Movimiento Evita y agregó que “en los barrios más humildes de la Ciudad se da una disputa entre distintas bandas de narcotraficantes”, quienes han armado “‘bunker’, que son lugares donde se vende la droga”.
Rosúa denunció que los ‘bunker’ son lugares “cerrados donde ponen chicos a vender droga durante muchas horas del día, los encierran ahí y con un grupo de gente armada ‘cuidándolos’”.
“Esto se viene generalizando en la Ciudad y lo que se ha dado en los últimos años es la disputa de territorio. Todos los días hay en Rosario algún asesinato, algún herido producto de los enfrentamientos”, subrayó Rosúa.
“Hace dos días (por el miércoles 9 de enero) mataron a una militante social que estaba en el barrio (Nueva Alberdi) cruzado por disparos que provenían del Barrio Ludueña”, denunció el dirigente del Movimiento Evita.
Esto que salió a la luz en Rosario, el “gobierno socialista lo venía negando”, advirtió Rosúa. El gobierno local lo atribuía a “ajustes de cuentas como si fueran problemas entre vecinos”, dijo. Pero salió a la luz el año pasado con “el Triple Crimen de Villa Moreno (ocurrido el 1° de enero de 2012) donde se descubrió toda la trama del narcotráfico y también vinculaciones con algunos sectores policiales”, destacó el dirigente político.
“Ya no se puede desmentir, lo conoce toda la sociedad rosarina: todos los días hay hechos como este. Incluso el Ministro de Seguridad del Gobierno de Santa Fe Raúl Lamberto “reconoció la existencia de bandas en disputa y sus dificultades e incapacidades para abordar el tema en una interpelación en la Cámara de Diputados (provincial)”, advirtió Rosúa.
Sobre la situación económica y social de los sectores populares de Rosario, Rosúa expresó que “hay un serio problema de infraestructura urbana, de falta de viviendas, falta de pavimento, falta de agua potable. Trabajamos con los sectores más humildes, tratando de generar organización popular y que los vecinos vayan fortaleciendo sus reclamos ante el Estado”, remarcó.
“El Gobierno siempre tiene la actitud de explicar, más de diagnóstico que de acción”, dijo el dirigente del Movimiento Evita. Acá hace falta “una fuerte presencia del Estado, generando pacificación en los barrios de la Ciudad y en las cuestiones más de fondo, en generar oportunidades para los chicos”, reclamó Rosúa.
“El tema ‘tremendo’ es que la mayoría de los chicos que se incorporan a estas bandas son los chicos sin trabajo, sin una perspectiva de vida, de futuro”, analizó Rosúa y exigió “una presencia fuerte de las fuerzas de seguridad del Estado, pero también una presencia de todas las políticas sociales”.
“En la Provincia de Santa Fe se habla pero no se hace nada. Esta es la impresión que tenemos todos en esta Ciudad”, concluyó el dirigente rosarino.