Los movimientos de la economía popular realizaron hoy jueves por la mañana asambleas masivas y ollas comunitarias en distintos puntos de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano para establecer como continúa el plan de lucha que se sintetiza en las consignas “paz, pan, tierra, techo y trabajo”. Miles de compatriotas compartieron el espacio público para rechazar una vez más las políticas del gobierno de Mauricio Macri.
Desde el Obelisco, nuestro cronista Mario Sadras dialogó con Esteban “Gringo” Castro, secretario general de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular, quien reclamó la participación del sector que conduce en la reunión del Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil convocada por el gobierno para la semana que viene. “Es una pelea que venimos dando desde hace mucho tiempo”, recordó Castro, y resaltó que “hay que reivindicar a los trabajadores de la economía popular”, que expresan 5 millones de cuerpos transformados en una fuerza de trabajo que se ha tenido que inventar el empleo en la época de la versión neoliberal del capitalismo.
“Participar del Consejo del Salario nos permitiría profundizar la institucionalidad que logramos con la ley de emergencia social”, destacó el dirigente, y señaló que “nuestra sociedad no puede seguir fragmentada y dividida entre los trabajadores que están en mejores condiciones y los que están en perores condiciones, con grados profundos de marginalidad. Tenemos que integrarlos política, social y económicamente”, insistió Castro.
En el Puente Nicolás Avellaneda en Dock Sud, activistas de El Fogón, la Organización Los Pibes, el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y el Movimiento Popular La Dignidad desarrollaron una concentración para denunciar el hambre y la miseria en los barrios abandonados a su suerte por el Estado, y exigir la convocatoria a las organizaciones por parte del gobierno nacional y de la provincia de Buenos Aires, para dar respuesta a las demandas alimentarias y laborales que luego de la devaluación posterior a las PASO se han ampliado y agravado.
Jony Castillo del MTE explicó a Radio Gráfica: “estamos haciendo una olla popular en protesta para que el gobierno se haga cargo del hambre en la Argentina. La economía está cada vez peor, nos están hambreando cada vez más”.
Castillo expresó que “los compañeros que cobran el Salario Social Complementario tienen el ingreso devaluado después de tanta inflación”, por eso están en la calle, a pesar de que “a dónde vayamos a protestar siempre hay represión. Al MTE siempre nos apalean”, denunció.
“La situación en los barrios es que la gente no tiene para comer, la está pasando cada vez peor”, relató Castillo, y precisó que ellos, “los cartoneros estamos un poco mejor, porque estamos organizados”, aunque reconoció si bien han ganado “algunos derechos, la política y la economía que tiene el gobierno no ayuda a las organizaciones ni a ningún compañero”.
Por su parte, el “Gringo” Castro restituyó el debate político de coyuntura entre las organizaciones populares: “hay un sector que plantea que el gobierno nacional se tiene que ir ya, y otro que dice ‘ganamos las elecciones, no abandonemos la calle, peleamos las reivindicaciones, pero no nos metamos en cuándo se tiene que ir” Macri.
“Esa tensión es razonable y nos permite convivir”, analizó el dirigente de la CTEP, y anticipó que en la movilización del próximo 28 de agosto “todos vamos a estar acá, en la calle”.
En esa movilización del 28, las diferencias de perspectivas no van a generar “ninguna intencionalidad de pelea entre los movimientos sociales”, aseguró Castro, por el contrario, “vamos a cuidar a las compañeras y los compañeros”, concluyó.
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