Tras la masacre de San Miguel del Monte, se produjo un nuevo caso de muerte por ‘gatillo fácil’ en la localidad bonaerense de Martín Coronado, donde otro joven fue ultimado a manos de las fuerzas de seguridad. José Schulman, secretario nacional de la Liga Argentina por los Derechos Humanos, analizó la problemática e informó acerca del comunicado de repudio a la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, emitido por diversos organismos de DD.HH.
En diálogo con Manuel Rivas en Punto de Partida, Schulman explicó que «es la segunda vez que pedimos la separación de Bullrich del Gobierno. Decidimos sacar un comunicado porque creemos que desde su asunción, desde el protocolo de seguridad hasta la operación de espionaje, gendarmería y jueces que terminó con el encierro de Facundo Jones Huala y los asesinatos de Santiago Maldonado y de Rafael Nahuel, Bullrich ha empujado una subversión del orden institucional en la Argentina. La doctrina tradicional es que el Estado tiene las armas pero solo las usa en caso de grave peligro. Bullrich empujó la idea de que el policía tiene derecho a tirar cuando se le ocurra«.
El titular de la Liga Argentina por los Derechos Humanos agregó que «esto va más allá del gatillo fácil, son ejecuciones sumarias en las que los policías se atribuyen el poder de juzgar, condenar y ejecutar sin pruebas ni proceso judicial. Incluso en la ley de guerra esto está tipificado como un delito. Acá se instala en los medios con toda naturalidad que el que tiene un arma puede hacer lo que quiera, y justamente las únicas armas legales son las del Estado. Desde nuestra organización le hemos propuesto a nuestras semejantes seis puntos de emergencia entre los que figura la prohibición absoluta a las fuerzas estatales de tirar. Las excepciones, como el peligro para la vida de un agente, están en el Código Penal. Hay que instalar en la sociedad que la policía está para prevenir el delito y para perseguir a los delincuentes, pero nunca para matar chicos, chicas o pobres, como si esto fuese una cacería«.
Finalmente Schulman se refirió a la propuesta de la pistola Táser al afirmar que «estamos haciendo una propuesta a partir del patrocinio judicial de Martín Danese, herido gravemente por un arma supuestamente ‘no letal’, para extender la prohibición de tirar a todas las armas. El problema es la mano que la empuña. Una mano cuidadosa puede tener un arma muy efectiva y no matar, y una mano asesina puede matar con una Táser o una pistola de balas de goma. La discusión no es técnica, sino humana. Pasa por la intención del policía, y por una la ley que sea no matar, con castigo severo al que lo haga«.
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