Darío Martínez, diputado nacional del Frente Para la Victoria por la provincia de Neuquén, conversó en el aire de Radio Gráfica con el equipo de Ya nada será igual acerca de la marcha del gobierno nacional a partir del informe de gestión que el Jefe de Gabinete, Marcos Peña, realizó ante el Congreso.
Martínez sostuvo que «Peña viene, escupe un montón de datos y se va. Esos datos siempre son mentira. Más allá del juicio del valor personal le dije que en sus últimas participaciones en el Congreso venía y decía cosas que no se daban. Por ejemplo que está bajando la inflación, que está aumentando el consumo de carne o que creció la industria automotriz. Son datos que él mismo refutó con otras declaraciones. Viene al Congreso a hacer un show de mentiras y se va sin contestar lo que se le pregunta. Esto se debe a que el gobierno no tiene otro proyecto. Van por este camino y pretenden acelerarlo. Los resultados son pésimos. Vamos hacia una recesión con inflación, el peor escenario posible«.
El entrevistado puntualizó que «es un programa político que favorece a los que viven del Estado. Las transportadoras de energía y las financieras, amigas del Presidente de la Nación, están haciendo grandes negocios. Pero no hay país que vaya para adelante si no empieza a producir. Esto fue parte del plan sin dudas. Dolarizar tarifas y remedios se hizo para favorecer a un sector. Desde el punto de vista de la política de resolverle los problemas a la gente son errores, pero desde el punto de las empresas energéticas son aciertos. Siguen pidiendo actualización de tarifas aunque sean sus balances sean superavitarios con ganancias que van del 800 al 1.500%«.
Por último Martínez estimó que un retornado gobierno popular deberá «modernizar el sistema judicial, que no se mostró a la altura de las circunstancias en numerosas oportunidades. En particular con la podredumbre que quedó expuesta tras el descubrimiento de las operaciones armadas por Marcelo D’Alessio junto con fiscales y jueces. Hay que avanzar contra la contratación de proveedores del Estado vinculados a guaridas financieras. Viven del Estado y no le tributan, causando una sangría monetaria porque se llevan el dinero afuera. Al mismo tiempo hay que tocar al sector financiero. Les doy un ejemplo. Mi primer proyecto de ley fue una modificación al régimen de Impuesto a las Ganancias. Tuvo media sanción, pero cuando llegó al Senado le faltaba el capítulo que afectaba a los bancos y las entidades financieras que al mismo tiempo van a tener problemas dentro de poco si por esta política nadie se pone a producir«.
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