En el marco del paro docente de 72 horas, Silvia Almazán, secretaria general Adjunta del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires (SUTEBA), explicó en Abramos la Boca los motivos de la medida de fuerza y las carencias de las escuelas bonaerenses en materia de infraestructura.
Almazán explicó que el paro tiene el objetivo de «visibilizar las problemáticas que atraviesan a la escuela pública de la provincia de Buenos Aires y cómo se están vulnerando no sólo derechos de los docentes, sino también de los estudiantes. En general se difunden más nuestras demandas salariales, pero lamentablemente a partir de las muertes de Sandra Catalano y Rubén Rodríguez en Moreno, ha tomado dimensión pública las deficiencias edilicias», pero denunció que el Gobierno de la provincia no dio una respuesta a las demandas y «sigue actuando como si no hubiésemos perdidos a Sandra y a Rubén».
Respecto a lo salarial, detalló que «las propuestas de aumento están siempre desfasadas respecto a las proyecciones de inflación. No sabemos cuánto vamos a cobrar mes a mes, es una lógica de ajuste, al igual que la falta de un plan de mantenimiento y refacciones».
En ese contexto, este martes comenzó el paro de 72 horas con «acciones en cada distrito para visibilizar ante la comunidad y los estudiantes los problemas que atraviesan las escuelas de los 135 distritos de la provincia. El miércoles 29 vamos a movilizarnos a La Plata. La gobernadora María Eugenia Vidal, el ministro Gabriel Sánchez Zinny y el ministro de trabajo Marcelo Villegas son responsables de lo que ocurre en las escuelas tanto a nivel edilicio como de todos los condicionamientos que hay al trabajo docente».
Por eso, detalló que «le estamos planteando al Gobierno de la provincia que se declare la emergencia edilicia, que haya un fondo extra con recursos y una decisión de obras ágiles para resolver estas problemáticas. Si estas obras se siguen demorando el ciclo lectivo 2019 va a empezar con muchas dificultades, porque además no se están haciendo todas la obras necesarias para que todos los estudiantes tengan un lugar garantizado en el sistema público de educación».
También destacó las importantes falencias en materia de comedores escolares, ya que «la demanda crece y no hay otra instancia de alimentación fuera de la escuela. Vemos que se está haciendo deficitaria la calidad de los alimentos y que se reducen las raciones porque no incrementan los cupos ni el monto por estudiante».
Finalmente, Almazán adelantó que los docentes bonarenses se sumarán a la movilización por la defensa de la Universidad pública, que se realizará el jueves 30, «porque el acceso a la universidad es también un derecho, nuestra pelea es integral».
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