Hernán Jaureguiber, abogado, estuvo al aire en Terapia de Grupo para analizar la intención del gobierno macrista en anular o reducir leyes laborales en nuestro país.
En diálogo con Gabriel Fernández, Jaureguiber expresó que «no me sorprende. Creo que es uno de los pilares básicos de la matriz de este gobierno. Lo que si me causa extrañeza es que, aparentemente, sea tan fácil instalar un tema que es sensible a los intereses del conjunto de los trabajadores».
Agregó sobre la repercusión en los trabajadores: «No es una ley. El derecho al trabajo es una construcción a lo largo de más de un siglo, así se fueron sedimentando muchas situaciones progresivas. En ocasiones, en el último medio siglo, ha tenido retrocesos pero en general siempre resaltó la progresividad. Es difícil saber qué es lo se proponen los empresarios que están en el gobierno, para liquidar toda esta construcción colectiva».
Ante una pregunta de Gustavo Ramírez, aseveró, sobre el fallo de la doble indemnización que «hace meses la prensa interesada había dado publicidad a un fallo de la corte en el cual se condenaba a un trabajador a pagar las costas. Esto es la utilización de una jurisprudencia histórica de la Corte. La instalación sorpresiva en la opinión pública alza la construcción, donde cada paso que esta dando la Corte en contra de los derechos de los trabajadores, se va dar publicidad para instalar un debate. Y los sujetos que deberían dar el debate, el Movimiento Obrero organizado, no lo están dando a la altura».
Respecto a la incidencia de las elecciones en el avance macrista, sostuvo que «un resultado adverso del oficialismo sería una pérdida de vigor de todas estas iniciativas, porque habría una recomposición de fuerzas en el escenario político. Tendría algún tipo de freno. Más allá del acto electoral, los sujetos que están involucrados en esta situación son los que tendrían que dar pelea. Yo no quiero con esto destripar la historia reciente del Movimiento Obrero».
Resaltó que «el sujeto por excelencia es el trabajador. Si el mismo sujeto no participa, se complica. Ni flexibilización, ni modernización, ni ningún tipo de cosas que sabemos que son Caballo de Troya, hacia el exterminio total»; y concluyó insistiendo en que «a quienes tienen mayor voz frente a las corrientes del Movimiento Obrero. Que abran bien los ojos. Porque esto es una guerra relámpago contra todos los sujetos que integramos el que hacer laborioso de la Argentina».
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