Gervasio Muñoz, referente de Inquilinos Agrupados, fue entrevistado en el programa Punto de Partida sobre la modificación de la ley de alquileres, la regulación en el mercado inmobiliario y los beneficios para el inquilino en la ciudad de Buenos Aires.
Muñoz explicó en primer lugar que «lo que se votó es una modificación a la ley que regula la actividad inmobiliaria, no es una ley de alquileres. Si fuera esto último tendría características más integrales para solucionar la cuestión o acercarse a ello. De todas formas se trata de un logro muy grande de los inquilinos. Se reguló el mercado inmobiliario en el aspecto de las comisiones. Ya no las va a tener que pagar el inquilino sino el propietario».
Luego el entrevistado puntualizó, respecto al marco general, que «hay un millón quince mil inquilinos en la ciudad de Buenos Aires como resultado de un proceso que viene desde fines de los ’90. La crisis económica dejó a muchos pequeños propietarios imposibilitados de pagar expensas. Por lo tanto entre 2000 y 2002 hubo muchos remates de viviendas que fueron a parar a manos de grandes propietarios. Luego en los últimos diez años, se construyó mucho como uso de la renta sojera pero al mismo tiempo se concentró la propiedad. El macrismo como socio de los grandes constructores respalda este fenómeno. El kirchnernismo por su parte tuvo una contradicción muy grande que tiene que ver con poner por delante la construcción como generador de empleo sin regular el mercado para que los alquileres no se lleven más de la mitad del salario. Asimismo tuvo una buena política como fue el plan PROCREAR, que fue mejor que los créditos hipotecarios que entrega el PRO. Estos últimos son una bomba de tiempo porque están atados a la inflación».
Finalmente Muñoz evaluó que el balance de la votación «es muy interesante porque describe muy bien el momento político. El día de la votación las inmobiliarias se movilizaron para protestarle la medida al jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta, el dirigente del Partido Obrero Marcelo Ramal dio un discurso que fue ovacionado por ellas, el FIT y los legisladores de Luis Zamora se abstuvieron de votar, mientras que toda la oposición y el PRO votaron a favor de la reforma. Los inquilinos hemos logrado poner en contradicción algunos intereses, y me parece sin lugar a dudas un avance».
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