Roberto Milio del Sindicato de Dragado y Balizamiento, Jonathan Pucheta del Sindicato de Trabajadores de Talleres y Astilleros Navales (SITTAN) y Juan Barbato de la Agrupación 18 de febrero del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) visitaron el estudio Patrick Rice de Radio Gráfica y debatieron acerca del presente de la industria naval y la navegación en Argentina.
En diálogo con Lucas Molinari en Punto de Partida los gremialistas caracterizaron la actividad y la falta de una política de estado soberana. «En los últimos cuarenta años no hubo una política de industria naval» planteó Milio. Pucheta, jóven dirigente de 32 años, asintió explicando que hubo avances con el kircherismo pero no una política integral. “Luego de la presidencia de Néstor, se generó la reestatización del astillero. Actualmente Tandanor depende de un 90% del capital accionario del Ministerio de Defensa y un 10% de los trabajadores” explicó Pucheta quien recordó que Julio Martinez planteaba, cuando era oposición, que el Almirante Irizar debía ser reparado en Finlandia. Su argumento era que en ese país nórdico «sería más económico». Sin embargo por decisión del gobierno de Cristina Fernández se arregló en nuestro país y fue el mismo Martinez, como ministro de defensa, quien aplaudió hace unos días la salida del rompehielo que estará listo para la campaña antártica 2019. Sobre Tandanor el dirigente afirmó: “Después del vaciamiento de los años 90, que generó el hundimiento de la industria, los trabajadores lucharon mucho para poder recuperar la industria naval que tenemos hoy”.
La caracterización de los tres dirigentes sobre la etapa política fue de mucha preocupación por la avanzada neoliberal. La posible reforma laboral que funcionarios macristas ya plantearon que presentarán después de octubre en el Congreso pero que ya se está dando de hecho en muchas ramas industriales. También según denunció Juan Barbato del SOMU se da en la actividad marítima. Como lo expresó Pucheta “este Gobierno está midiendo cuando llevar a cabo la flexibilización laboral”.
El SOMU está intervenido desde el 18 de febrero de 2016, pero no se normaliza. Al contrario, porque ya son más las entidades gremiales intervenidas, como pasó con SIVENDIA (Sindicato de Canillitas). Barbato explicó que son «el primer sindicato intervenido con este gobierno que no quiere acatar las órdenes de la Justicia, ni quiere entregar el gremio a las nuevas autoridades elegidas por los afiliados”. A la vez del dirigente apuntó contra la actual directora del ACUMAR y precandidata para el Senado de la Nación por la Alianza Cambiemos: “Gladys González fue apartada por una denuncia que realizamos nosotros por la incompatibilidad en las funciones, donde recibía doble sueldo al ser funcionaria e interventora. La causa cayó en el juzgado de Servini de Cubría en el cual la hacen renunciar al SOMU y a la Banca, para acomodarla en ACUMAR. Luego vino una Junta Normalizadora del Ministerio de Trabajo, quien nos decretó 180 días más desde febrero para normalizar el gremio. Esto comenzó siendo una intervención judicial por la denuncia penal para apartar al secretario general pero se convirtió en una intervención política”.
“Sin buques no hay astilleros, y sin astilleros no hay trabajo” sintetizó Milio, quien ejemplificó: «se crean alrededor de un sólo barco más de diez mil puestos de trabajo de las carpinterías hasta los soldadores». En ese sentido los tres dirigentes plantearon la importancia que las leyes de Marina Mercante y de Industria Naval que obtuvieron media sanción en el Senado en noviembre de 2016 sean tratadas en Diputados. Proyectos que han tenido un consenso del conjunto de los sindicatos, pero no pareciera de la clase política ya que su debate está frenado en la Cámara Baja. “Tenemos más de 4 mil kilómetros de costa floreal y marítimas, en estos últimos 40 años no hubo política de Estado”, afirmó de manera crítica el gremialista de Dragado y Balizamiento.
Es decir que el panorama no es bueno. Un gobierno que va contra los trabajadores en un contexto de crisis económica y de pérdida de puestos de trabajo. Leyes que fueron fruto del accionar sindical que impulsarían la industria naval que parecen estar fuera de la prioridad de los diputados. Pero se demostró en el aire de Radio Gráfica una certeza que entre otros Juan Barbato del SOMU expresó “este Gobierno nos quiere llevar a lo mismo que pasó en los 90, pero los trabajadores estamos en alerta para levantar nuestras banderas y mantener nuestros derechos”.
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