Una orden judicial permitió a la empresa COTO retirar los cueros de la curtiembre Espósito ubicada en Sarandí, en el medio de un conflicto gremial que atraviesan los trabajadores por 57 despidos. Luis Barrientos, secretario de prensa del Sindicato de Obreros Curtidores, en diálogo con el programa Punto de Partida, explicó la situación.
“Ayer se armó una carpa donde los compañeros toman la decisión de resguardo de la materia prima de laburo, que es la garantía de los trabajadores, y hoy nos encontramos con que viene la infantería con tres dotaciones, mas la policía, cortan la vía pública y no nos dejan llegar hasta la fabrica”, relató Barrientos.
“Apareció la secretaria de la jueza diciendo que tiene una orden de COTO de retirar la mercadería de la planta. En realidad es una manera encubierta de empezar a vaciar la empresa”, agregó el trabajador. “Hoy la justicia está a favor de los empresarios y no de los trabajadores. Esto es un conflicto laboral”, sumó.
COTO es cliente de la empresa Espósito, la cual tiene una dotación de 110 trabajadores de los cuales 57 fueron despedidos. A partir de allí, comenzaron la medida de fuerza, explicó Barrientos: “Hace 20 días venimos con medida de acción, fuimos al Ministerio de Trabajo que dictó la conciliación obligatoria que la empresa no acató, porque los trabajadores siguieron estando afuera”.
El no acatamiento de la conciliación obligatoria, dijo el curtidor, “lo hicieron con la complicidad del Ministerio de Trabajo”. “Cuando fuimos de nuevo a denunciar (a la cartera de Trabajo) nos dijeron que la conciliación es con los trabajadores en la calle”, señaló.
“Claramente las políticas han cambiado a favor de los que más tienen”, remarcó el secretario de Prensa y adelantó: “Iremos al juzgado de la jueza a hacer nuestra denuncia también”.
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