
Bajo la premisa de romper con el cerco mediático, el recién conformado bloque Peronismo para la Victoria, convocó a los medios populares a una conferencia de prensa reducida en el despacho de Leonardo Grosso. Lo reciente del espacio quedó evidenciado cuando un llamado ingresó a la oficina. Era para encargar los sellos con el nuevo nombre.
Una semana atrás, el Movimiento Evita había decidido separarse del Frente para la Victoria. Enmarcado en el escándalo del caso José López y la aprobación en Diputados del allanamiento al domicilio de Julio De Vido por enriquecimiento ilícito, un grupo de seis legisladores tomó la decisión de hacerse a un costado y conformar su propio espacio. Se trata de Leonardo Grosso, Andrés Guzmán, Lucila De Ponti, Remo Carlotto, Araceli Ferreyra y Silvia Horne.
Del encuentro realizado en el 9º piso del anexo de Diputados, en el despacho de Grosso, participaron también Lucila De Ponti y Silvia Horne. La rueda de prensa – informal – se caracterizó por las rondas de mate y los sanguchitos de miga (que tan famosos se hicieron en el Congreso).
La ruptura del bloque del FPV no está vinculada al caso López sino a «un análisis que veníamos realizando desde hace un tiempo, con más énfasis a partir de la derrota del año pasado», inició la charla De Ponti y puntualizó que «hace meses o años veníamos viendo que el FPV tenía una tendencia a generar acciones endogámicas y generaba un achicamiento del espacio político. Discusiones políticas y no sociales».
La diputada entendió que «por parte de la conducción del FPV había una tendencia a construir un espacio ideológicamente más fuerte pero socialmente más chico que, de alguna manera, iba achicando al movimiento popular y esto se profundizó con la derrota del 22 de noviembre».
Al respecto, Grosso analizó que «la derecha no tiene la voluntad moral para venir a corrernos con la corrupción. Ellos hicieron su fortuna haciéndose cómplices de las dictaduras militares, estatizando las deudas privadas y con la patria contratista y la entrega de la Argentina entera en los 90. ¿Qué nos van a venir a decir ellos a nosotros? Nosotros no podemos tener debilidad moral, no hay lugar para la debilidad moral en los proyectos que pretenden luchar contra las desigualdades sociales. Ahí tenemos que ser el doble de categóricos con los hechos de corrupción que salen de nuestro espacio». Sin embargo, sostuvo que no fue el el detonante de la ruptura porque «la crisis del FPV no empezó el 22 de noviembre del año pasado. Venimos perdiendo sectores del campo nacional y popular hace años: Libres del Sur, Hugo Moyano. Con discusiones que quizá eran necesarias y era necesario pagar ese costo pero también era necesario recomponer rápidamente. Necesitamos recalcular y arrancar nuevamente».
Ambos diputados manifestaron la necesidad de hacer una autocrítica dentro del Frente para la Victoria. De Ponti sostuvo que hubo ciertos «límites para avanzar en la modificación estructural del modelo económico, en la desconcentración de la economía, el hecho de que grupos de poder o corporaciones sigan marcando aspectos fundamentales vinculados al ordenamiento estructural social y económico de nuestro país». En este sentido, señaló que hubo una transferencia de recursos durante el kirchnerismo pero que este modelo «no estuvo acompañado por la consolidación de estructuras de trabajo, de la participación en el proceso que pudiese dar una raigambre más profunda».
El titular del bloque indicó, en esta línea, que «si queremos volver, tenemos que volver siendo mejores y preparados para no cometer los mismos errores y no tener los mismos límites. No hubo falta de voluntad a la hora de resolver los problemas, quizá no nos dio la relación de fuerza porque nos faltó tiempo o darle protagonismo a ciertos sectores populares. Al interior del bloque nosotros no veíamos ninguno de nuestros planteos y en un contexto como éste se agudizan las tenisones».
Por estos motivos, De Ponti agregó que «entendíamos que faltaba una perspectiva más histórica de no atarse a una etapa o identidad, sino que el movimiento nacional puede ir asumiendo otras formas».
En cuanto al proceso de deskirchnerización, Grosso fue tajante: «No renegamos de Néstor, no renegamos de Cristina. Estamos orgullosos de que el pueblo haya construido esos 12 años de conquistas populares. Nos vamos del bloque pero no del proyecto. Tenemos diferencias políticas pero no ideológicas. Necesitamos construir un proceso de reagrupamiento del campo nacional y popular y eso tiene que ser con las banderas del kirchnerismo adentro».
Sobre la figura de la ex Presidenta, el diputado afirmó que «a Cristina la queremos. Es una referencia ineludible para nosotros, para nuestra historia. El proceso de lucha se sintetizó en la figura de Néstor y Cristina. A ella no le podemos pedir más nada, dio todo lo que tenía para dar y más. Veníamos en una dinámica donde estábamos muy acostumbrados a su presencia y es muy difícil salirse de eso al principio, pero es imposible que esté como estaba antes porque no es más Presidenta».
Además, el titular del bloque sostuvo que «Cristina es líder pero no conduce, no está definiendo la política, cómo se construye o cuál es la batalla principal. No está hoy en el teatro de operaciones». Respecto a esto, De Ponti señaló que «ahora no está sintetizada una conducción. Hoy no aparece un conductor legítimo del conjunto de los sectores. En este momento hay que discutir ideas de reunificación del campo popular y no nombres propios».
«La unidad del peronismo, el próximo liderazgo, la posibilidad de reconstruir el campo nacional se da en la calle, no es algo que se resuelva en el Congreso, en una rosca o en un acuerdo partidario. La única forma de ganarle a Macri el año que viene es con la lucha social«, sostuvo Grosso.
En esta línea, en cuanto a la posibilidad de aliarse con sectores que han acordado con el macrismo, como Sergio Massa o Hugo Moyano, el titular del bloque Peronismo para la Victoria advirtió que «depende de lo que sigan haciendo. Si ellos siguen apoyando a Macri, están al horno porque eso no lo vamos a hacer nunca. Si empiezan a defender los intereses del pueblo, va a haber posibilidades de acuerdo. Un ejemplo fue lo que pasó con la Ley Antidespidos». En esta línea, De Ponti agregó que «hay que aislarlo a Macri y eso lo vamos a tener que hacer en diálogo con un montón de sectores políticos con los que no coincidimos en muchas cosas. Aparte de la Ley Antidespidos, en el Congreso no pudimos articular ninguna otra iniciativa».
En el marco de una posible nueva ruptura del FPV con el apartamiento del Partido Justicialista, De Ponti afirmó que «la conducción que tenemos del PJ fue la posible. Creo que es una herramienta formal, electoral y su función está determinada desde afuera. Si no logramos construir una reunificación del peronismo con la centralidad puesta en las necesidades populares, el PJ va a ser la rueda de auxilio de un proyecto que quizá no nos va a representar».
Como primeras propuestas, el nuevo bloque buscará declarar la emergencia social en el Congreso; la creación de un salario complementario que sostenga a los trabajadores de la economía popular. «Hay que transformar el subsidio en salario», sintetizó Grosso. Según señalaron, se buscará generar propuestas que regulen a la economía popular que hoy está fuera de las estructuras jurídicas. Como cambio de política, la «despenalización del aborto es uno de los ejes de este bloque. Violencia policial e institucional. Despenalización de la marihuana para uso terapéutico. Por supuesto que también está adentro la política de memoria, verdad y Justicia, así como la defensa al consumidor frente a los tarifazos», adelantó Grosso.
Finalmente, en cuanto al futuro del FPV, Grosso entendió que «es el capítulo contemporáneo del peronismo. No desaparece el campo popular, la sociedad no se suicida, se reconvierte y sale para adelante». Respecto a quienes los trataron de traidores por irse del espacio, los diputados aseguraron que «los perdonamos a todos, no tenemos rencor».
«Cada uno tiene que sacar su bastón de mariscal. En este momento hay liderazgo pero no conducción. Sacamos cada uno nuestro bastón, juntamos lo que juntemos y cuando aparezca esa conducción, entregamos el bastón de mariscal, lo entregamos. Si es Cristina, es Cristina», concluyó el diputado.
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