
Eduardo Reese, Director del Área de Derechos Económicos, Sociales y Culturales del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) y arquitecto urbanista, analizó en Punto de Partida el trasfondo en relación a las inundaciones en la Provincia de Buenos Aires.
En primer lugar reflejó que “estamos frente a un evento excepcional en términos climáticos” aunque a la vez consideró que estos temporales “cada vez son más usuales producto del cambio climático” y “deberían dejar de ser una novedad”.
Otro factor a tener en cuenta son las características territoriales de la Provincia de Buenos Aires. “La pampa húmeda es una topografía muy plana con problemas importantes de drenaje”, describió el arquitecto haciendo hincapié en “la ancha franja costera del centro-norte, que es una pampa deprimida con humedales, una especie de plato”.
En diálogo con Lucas Molinari, Reese repasó que históricamente sucedió respecto a la tierra para habitar. “En general los patrones de urbanización y ocupación del territorio han sido dominados por una lógica mercantil que fue muy irrespetuosa de cualquier característica ambiental, natural y paisajística a favor de rápidas ganancias inmobiliarias y productivas”, afirmó.
Teniendo en cuenta esa construcción, el integrante del CELS analizó que “hay una puja importante entre los derechos del conjunto de la sociedad versus los derechos individuales de ganancia mercantil de grupos reducidos”. Asimismo ratificó que esa tensión “sólo se resuelve a través de la política y un actor fundamental para resolver a favor de los derechos populares es el Estado”.
También hizo referencia a la Ley de Hábitat de la Provincia de Buenos Aires que “es aplicada por algunos municipios y otros no” y consiste en “dar instrumentos al estado para poder intervenir en el ordenamiento territorial para que no quede en manos del mercado” a través de “mecanismos de gestión positiva que facilitan proyectos de urbanización y castigos en términos impositivos a la especulación inmobiliaria”.
En declaraciones públicas Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, candidatos a presidente de la Nación y gobernadora de Provincia de Buenos Aires respectivamente, aseguraron que con ellos en el poder estas situaciones no sucederían. Ante eso, el arquitecto respondió que “son dos mentirosos seriales” argumentando que “sus ocho años de gobierno en la Ciudad demostraron que el mercado es el que gobierna. No hay mayor evidencia que su propia gestión”.
Refiriéndose a los últimos doce años expresó que “tenemos que hacer una autocrítica de las limitaciones que ha tenido la política territorial para regular los intereses del mercado inmobiliario a favor de los más pobres”. En ese sentido manifestó que vivimos en un país “que en estos doce años fue capaz de meter preso a Videla pero no sacarle un mango a los especuladores”.
Por último, apuntó que es fundamental “avanzar en un Estado que proteja a la población, construya ciudad sostenibles en términos sociales y ambientales que no esté atada a eventos climáticos”.
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