Hoy se cumplen 17 años de la masacre de Avellaneda, en la cual la policía bonaerense asesinó a los militantes populares Maximiliano Kosteki y Darío Santillán. Organizaciones sociales y políticas, compañeros y familiares de Maxi y Darío, como cada año, intentaron realizar un acto en el puente Pueyrredón para recordar la militancia de los jóvenes y seguir exigiendo que se investigue y juzgue a los responsables políticos de los asesinatos. Sin embargo un fuerte operativo policial, dispuesto por la ministra de Seguridad Patricia Bulrrich, les impidió el paso.
Karina Lopez Monja, del Frente Popular Darío Santillán, y periodista presente en el lugar, informó en Radio Gráfica que “por primera vez en 17 años la policía y el gobierno nacional impiden que se realice un acto en el puente Pueyrredón en homenaje a Maxi y Darío”.
Desde la subida al Puente Pueyrredón, donde está ubicada la enorme valla dispuesta por las fuerzas de seguridad, Alberto Santillán, padre de Darío, denunció: “no les alcanza con seguir reprimiendo y matando. Somos familiares que queremos subir al puente para honrar a nuestros hijos, recordar esta fecha. Nos han empujado, pegado, con la clara voluntad de no dejarnos pasar”, y agregó: “hacemos responsable a la ministra Bullrich si llegan a haber acontecimientos más graves. Que se haga cargo una vez en su vida, y que no permita la represión si es que tiene un poco de conciencia”.
Por su parte, Vanina Kosteki, hermana de Maxi sostuvo: “Cuando quisimos acercarnos para dialogar y negociar nos pegaron, golpearon a mis hijos, a la familia de Maximiliano. Queremos justicia y este gobierno lo único que nos da es muertos”.
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