Las elecciones municipales de Córdoba arrojaron un nuevo revés para el gobierno nacional a la vez que resultaron positivas para el peronismo local, que recuperó el gobierno de 28 localidades
Ilda Bustos, secretaria general de la Unión Obrera Gráfica Cordobesa y referente de la Corriente Federal de Trabajadores (CFT), dialogó en Radio Gráfica con Gabriel Fernández para analizar el comicio.
Según Bustos «la idea de separar las elecciones municipales de la elección gubernamental no tuvo el efecto que buscaron los radicales y Cambiemos. El peronismo ganó las intendencias que tenía y perdió una sola a manos de un partido vecinal, mientras que los radicales conservaron algunas pero no pudieron exhibir ningún triunfo; fue unido en algunos casos, con diferentes características según el lugar. Los radicales de Ramón Mestre dijeron que buscaron debilitar al oficialismo representado por Mario Negri, que efectivamente sufrió una derrota. Pero al margen de eso Mestre tampoco puede exhibir ningún triunfo contundente en favor de su candidatura«.
La gremialista agregó que «los armados impulsados por el gobernador Juan Schiaretti serán evaluados por lo que pase en la capital provincial. Política y electoralmente la ciudad es el lugar más importante de votación. En el interior el triunfo de Schiaretti es casi indiscutido, pero en la ciudad no se sabe. Desde el movimiento obrero la definición es que Cambiemos y sus socios deben ser derrotados. Respecto a la interna entre las diversas ramas del peronismo cayó bien entre el delasotismo y los partidarios de Schiaretti que se haya bajado la candidatura kirchnerista de Pablo Carro. Para tener de nuevo un gobierno nacional y popular no interesaba que esa expresión política obtuviera un tercer o cuarto puesto. En cambio se dio de manera efectiva la unidad de criterio y acciones«.
Finalmente Bustos afirmó que «una parte mayoritaria del movimiento obrero aspira a que Cristina Fernández de Kirchner sea candidata a presidente. Siempre le tuvimos un poco de temor a la polarización y a la forma en que los medios hegemónicos la utilizan para derrotarnos. Pero este resultado electoral y el cambio en la mirada de amplios sectores, sobre todo populares, nos inclinan a pensar que una candidatura de Cristina es algo deseado no solo por los identificados con el proyecto nacional y popular, sino también por sectores que hace tres años hubieran elegido otra opción. Las expresiones de dirigentes como Antonio Caló de la UOM o de Ricardo Pignanelli del SMATA, arrastran sin duda la opinión de los compañeros encuadrados en esos sindicatos«.
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