
Los gremios de trabajadores aeronáuticos en unidad dispusieron que Pablo Biró, secretario general de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) sea nombrado en el directorio de Aerolíneas Argentinas por la representación obrera según el Programa de Propiedad Participada de los trabajadores. El dirigente dialogó con Carla Pelliza y Lautaro Fernández Elem en Desde el Barrio sobre su nombramiento y la realidad en que se encuentra la línea de bandera y el sistema aerocomercial argentino.
La renuncia de Rodolfo Casali, quien ocupaba ese cargo en el directorio de la aerolínea de bandera, llevó a que los gremios decidieran colocar allí a un sindicalista crítico a la gestión macrista y que logró torcerle el brazo al ministro de Transporte, Guillermo Dietrich cuando quiso imponer las licencias automáticas para pilotos extranjeros. “El cargo sería como un director obrero. Dentro de la empresa hay una reunión de directorio por mes y te da acceso a información estratégica. Con este gobierno la mayoría de las decisiones son en contra de Aerolíneas Argentinas, no hay ninguna postura en defensa de la línea de bandera ni de los cielos nacionales”.
Tanto APLA como la Asociación de Personal Técnico Aeronáutico (APTA), la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (Upspa), la Asociación Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (Atepsa), la Asociación de Tripulantes de Cabina de Empresas Aeronáuticas (Atcpea) y la Asociación de Personal Aeronáutico (APA), llevan adelante y en conjunto todas las medidas de fuerza contra la política aerocomercial del gobierno de Mauricio Macri.
La designación de Biró le permitirá al frente gremial tener conocimiento cabal de los números reales de la economía de la línea de bandera y, sobre todo, cuáles son los planes a futuro de la gestión macrista que ha promovido la aparición de lineas aéreas de bajo costo en desmedro de Aerolíneas Argentinas y Austral. “Muchas de las medidas que está tomando el gobierno están fuera de la ley así que es una herramienta importante pero no resuelve los problemas que están generando” destacó el referente a Radio Gráfica.
A fines del año pasado y comienzos de 2019 el Ministerio de Transporte que conduce Dietrich buscó modificar la normativa aérea para permitir que puedan comandar las aeronaves pilotos extranjeros. Eso generó una fuerte disputa entre el gremio de Biró con Dietrich quien a mediados de enero debió retroceder en su intento flexibilizador y mantuvo la normativa tal como estaba. Es por eso que entre los dirigentes gremiales aeronáuticos consideran que la elección de Biró no será una buena noticia para el gobierno de Cambiemos. “Muchas de las medidas que está tomando el gobierno están fuera de la ley así que es una herramienta importante pero no resuelve los problemas que están generando” destacó el hombre de la Corriente.
El piloto no evitó referirse a la situación que está viviendo la CGT, donde muchas de sus organizaciones impulsan una gran movilización el 4 de abril pero cuya conducción se mantiene inmóvil. “Las expectativas habría que ponerlas en Ghillini, Amichetti y los compañeros de la Corriente que vienen dando la pelea. La CGT es un espacio de disputa en donde hay intereses cruzados” señaló y ató a los intereses políticos personales la indefinición de la central: “hay una eterna discusión para ordenarla supeditada a la política partidaria. Hay un nivel enorme de autocomplacencia hasta que se organice lo electoral. Los que tienen posibilidades de definir políticamente como el kirchnerismo y el PJ todavía no lo han hecho, y la CGT va a estar subordinada a eso porque hay intereses individuales o sectoriales. Hasta que eso no se subordine en vez de lo individual a lo colectivo, no hay salida, tenemos que estar todos bien, no un sector”. Para el referente, los integrantes del consejo directivo “están teniendo un carácter testimonial y al degradarse las instituciones como la CGT nos degradamos todos como organizaciones gremiales”.
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