Daniel Maciel y Leonardo Díaz, delegados del Sindicato de Guincheros, dialogaron con Lucas Molinari en Radio Gráfica FM 89.3 en el día 36 del conflicto en el puerto de Buenos Aires por los 160 despidos en Terminal Río de la Plata.
A metros de la estación de Retiro está la entrada al puerto, allí mantienen hace 36 días la «Carpa de la Dignidad» en rechazo a los telegramas de despidos de 160 trabajadores.
El conflicto lo lleva adelante la FEMPINRA (Federación Marítima Portuaria y de La Industria Naval de La República Argentina) que conduce Juan Carlos Schmid.
La conciliación obligatoria se viene postergando pero vence el próximo 23 de agosto. Daniel Maciel anunció que de no haber solución se prepara un «paro nacional en todos los puertos del país».
Los representantes gremiales explicaron que sostienen la Carpa sin afectar el trabajo en el puerto. «Para que no pase lo que ocurrió con Camioneros», explicó Díaz, dando cuenta de la multa millonaria que el Ministerio de Trabajo le impuso al sindicato que conduce Moyano por hacer asambleas informativas en el marco de una conciliación obligatoria.
En la charla en el estudio de Radio Gráfica Maciel y Diaz remarcaron: «Somos un caso testigo en Argentina y a nivel mundial, todos están mirando cómo se resuelve esto porque se sabe que acá tenemos conciencia sindical. Se ve que en el ADN de los argentinos hay algo de Perón o de la lucha sindical, y en el mundo no se logró hasta ahora que una empresa de esta magnitud como Maersk, ni siquiera revea cómo se puede resolver esto. Nosotros al menos logramos que se sienten a dialogar».
Los delegados denunciaron que la empresa danesa Maersk se estaría quedando con el monopolio del puerto porteño, que se iría achicando para dar lugar a los negocios inmobiliarios. En diagonal a la Carpa de la Dignidad ya se puede ver el viejo Hospital Ferroviario donde se construye el complejo «Quartier», «donde están como inversores Caputo y Calcaterra», afirmó Diaz.
Se trata entonces de un conflicto con muchas aristas, pero donde no se puede desconocer el trasfondo: que nunca se revirtió la privatización de los puertos y que como definió Maciel «nos están llevando a sólo tener puertos de cabotaje en Argentina».
LM/GF/RG
