
Un informe del Laboratorio de Seguridad en las Comunicaciones de la Universidad Tecnólogica Nacional (UTN) confirmó que al menos el teléfono celular de la esposa de uno de los 44 tripulates del ARA San Juan fue «intervenido» de manera ilegal por una computadora especializada en interceptación.
Ariel Garbarz, Ingeniero en Electrónica y en Telecomunicaciones, Profesor de Seguridad de las Comunicaciones de la UTN y perito consultor de la Justicia Federal explicó en Radio Gráfica que «Valeria Carreras, abogada apoderada de familiares de los submarinistas se presentó en la UTN» para solicitar que «se chequeen celulares«. Uno de los dos teléfonos presentados no tenía interceptaciones, pero el segundo sí.
Aún no se pudo identificar el modelo o tipología de la computadora especializada porque «se defendió mandando virus que atacaron a nuestra computadora y la dejaron fuera de funcionamiento. Esas contramedidas son características de una clase de equipos que hacen pinchaduras sin necesidad de que la empresa telefónica brinde una conexión. Lo hacen de forma autónoma, con lo cual concluimos que no son equipos que se utilizan para interceptaciones judiciales, sino que es una interceptación claramente ilegal«, detalló el experto.
El peritaje se hace sobre la línea telefónica celular y no sobre el aparato. Según detalló Garbartz, desde la UTN «ingresamos el número telefónico en nuestra computadora, se conecta y si ahí hay una computadora extraña conectada, también nos conectamos con la interceptora». La mujer que sufrió la pinchadura del teléfono detectó que «le desaparecían íconos del celular, como si una persona controlara de forma remota el teléfono. También se le apagaba y encendía solo, con la sensación de que alguien, desde algún lugar, estaba teniendo control de su celular«. Estos interceptores utilizan «un firewall troyano que realiza este tipo de operaciones y pueden tomar control total del celular, como si lo tuvieras clonado en otro lugar«.
Si bien «en la gran mayoría de los casos, los teléfonos no están interceptados, en los últimos años van en aumento», detalló el especialista. «En general son plataformas de equipamientos muy costosos, de cientos de miles de dólares y una sola máquina puede pinchar decenas de miles de teléfonos en forma simultánea. Chequeamos un equipo en Argentina pinchando 48 mil celulares al mismo tiempo. Si lo comparás con los 50 millones de celulares, es una cifra bajísima, pero si lo comparás con la cantidad de personas que tienen poder de decisión – políticos, jueces, periodistas -, es una cantidad bastante preocupante. Podés incluir a todos los jueces federales, a todos los periodistas políticos, a los empresarios más importantes del país, a casi la clase política entera».
CP/GF/RG