Daniel Catalano, secretario general de ATE Capital, fue consultado en Punto de Partida acerca de los preparativos para la movilización sindical que se realizará este miércoles 21 de febrero.
Catalano informó en primer lugar que «ATE Capital va a concentrarse en Independencia y Lima a las 11 de la mañana. Vienen compañeras y compañeros de todo el país. Va a ser una jornada muy intensa, un día histórico para el movimiento obrero. Van a ir más de las quinientas mil personas que esperan los organizadores. Pienso que se rompió con el cerco y la protección mediática. Mauricio Macri cansó con el ataque desmedido a las organizaciones sindicales. Va a haber mucha participación de ciudadanos que quizás no están enrolados en un sindicato pero que entienden que hay un punto de inflexión, que no se pueden pagar las tarifas que estamos pagando o trabajar con el temor a que te despidan, o negociar paritarias por debajo de la inflación real».
Luego el dirigente gremial sostuvo que «el día después nos va a dejar un saldo organizativo enorme, habrá un marco de trabajo y unidad que es necesario. Tenemos la certeza de que estamos fortaleciendo al movimiento obrero. Además no hay otra posibilidad que la unión del campo sindical. No es necesario sostener organizaciones sindicales que expresen a minorías sino consolidar el marco de unidad real en una sola institución. Existe la realidad de que un sector de la CGT acuerda con el gobierno, pero ese problema es mejor que sea un problema interno discutible y solucionable dentro de una sola organización antes que tener cinco expresiones sindicales en la calle porque provoca mucha dispersión».
Finalmente Catalano señaló que «no sabemos cómo se va a materializar la relación con los partidos políticos. En ellos se juegan otros intereses como vemos en el Congreso. Para la foto aparecen todos, pero cuando hay que votar algunos se hacen los zonzos. Entonces el rumbo de los partidos se irá consolidando de otra manera. En el movimiento obrero las urgencias son más directas. Uno tiene detrás de si a los afiliados que lo eligen o no como representante. Y eso es lo que está crujiendo en estos días. Las representaciones sindicales están en un debate, en una transformación. No hay obediencia debida en los sindicatos, a pesar de las declaraciones de algunos dirigentes hay regionales que se movilizan y fábricas que van a parar igual».
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