Es miércoles, ya pasó casi una semana del trágico incendio ocurrido en el conventillo de Pedro de Mendoza 1447, en el barrio de La Boca. El siniestro dejó un saldo de cuatro muertos, entre ellos una beba, y decenas de familias en las calles. Desde entonces, los damnificados acampan en la puerta del lugar y esperan poder entrar a sus hogares ya que, como ocurre en estas situaciones, en la huida salieron sin ninguna pertenencia. El conventillo se encuentra custodiado por oficiales de la Policía que impiden el ingreso de los vecinos porque, según una arquitecta contratada por el Gobierno porteño, se encuentra en peligro de derrumbe.
Alicia Ychpas Araujo, una de las damnificadas que acampa desde hace casi una semana, dialogó con Radio Gráfica y, envuelta en lágrimas, manifestó que «nadie viene, nadie da una respuesta. Si hay un supuesto derrumbe, que vengan a arreglarlo. Pero no hacen nada. Yo tengo un nene de tres años y hace dos días no lo veo porque lo tuve que mandar a dormir a la casa de la abuela. Me acompaña mi hijo de 19 años».
La vecina recordó que cuando ocurrió el incendio, “nosotros salimos por el humo, mucha gente salió por el humo. Y salimos como estábamos, así nomás. Las cosas están adentro. No me quiero imaginar cómo están (sus pertenencias), me pone mal. Ahora se acerca (el comienzo de) la escuela, ya la otra semana tengo que entrar a laburar y ¿qué hago? ¿cómo voy a hacer con la comida? Me la estoy craneando porque hoy es miércoles y no hacen nada, no pasa nada. Me agarra la impotencia de no poder hacer nada, que nadie venga, ni siquiera un canal (de televisión). No se qué pasó”.
Alicia explicó que “es la primera vez que me pasa esto. Yo vivo hace seis años ahí, pero hay gente que vive hace 30 años. No entiendo cómo pueden venir (desde el Gobierno de la Ciudad) y no ver que las cosas están adentro, que se acerca (el comienzo de) la escuela. (El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez) Larreta no mandó a nadie. No entiendo cómo pueden no mandar a alguien para solucionarnos» el problema, se lamentó.
Por su parte, el Gobierno porteño les ofreció dormir en paradores, propuesta que fue rechazada por los vecinos porque “nadie quiere recibir nada de paradores o plata ¿qué hacemos con eso? Las cosas nuestras están acá adentro. No es la solución, yo necesito mis cosas. Ya debe estar podrido todo lo que había en la heladera y ni siquiera nos dejan entrar para sacar eso”. Incluso “el señor al que le falleció toda su familia está acá, quiere entrar igual, quiere armar sobre lo que se derrumbó, quiere seguir viviendo ahí”.
En este marco, Alicia denunció la ausencia de parte de las autoridades porteñas que “el sábado habían quedado en que tenían que entrar los arquitectos, el Juez quería dar autorización solamente al arquitecto del Gobierno de la Ciudad y no al del barrio, entonces por ese motivo no se pudo entrar y ahí quedó eso y ahora estamos así”.
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