María Laura Torre, secretaria gremial de SUTEBA (Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires), conversó con Abramos la Boca acerca del conflicto gremial que se desarrolla en la provincia y de las medidas que pretende tomar la goberanadora María Eugenia Vidal.
Torre señaló que «hay que empezar a plantear por qué está pasando todo esto y en qué escenarios nos está poniendo, intencionalmente, el gobierno nacional. La campaña en las redes sociales por el voluntariado docente aparece en respuesta a las decisiones que tomamos como CTERA. El gobierno no convocó a la partitaria nacional poniendo en riesgo el salario de todos los docentes del país. No solo no hay diálogo sino que además se viola la ley de paritarias. Discutimos con legisladores de todo el país y se decidió un paro de 48 horas para exigir la negociación salarial. Después aparecieron estos mensajes, que minan con mucha violencia algo que debe ser discutido».
La entrevistada marcó las contradicciones del gobierno nacional que «el año pasado mantuvo la negociación nacional, que si bien tuvo debate y tensión, consiguió un acuerdo y hubo clases. Entonces, ¿qué pasa que este año no convocan la paritaria y por qué pretenden imponer un techo obligatorio del 18% de aumento salarial? El 6 vamos a movilizarnos al Palacio Pizzurno, y la movilización tiene que ser suficientemente fuerte como para que no puedan llevarse puesta la paritaria nacional. ¿Cómo podría el ministro de Educación explicar que está violando una ley? Por eso no aparece por ningún lado».
Por último, y sobre argumentos según los cuales la medida de fuerza es política Torres recordó que «hicimos diecisiete días de paro durante el gobierno de Daniel Scioli. A pesar de lo que digan hoy la nuestra no es una lucha contra un partido en particular, sino contra una política orientada a romper la negociación nacional. ¿Qué pretenden?, ¿que el ministro de Economía negocio los sueldos con cada gobernador? Son los salarios de los docentes, no de los funcionarios. Este gobierno dejó pasar todo enero y febrero y pretende imponer un tope por decreto. Son ellos los que nos toman de rehenes a nosotros y a los alumnos. Los docentes nos formamos para dar clase, no para hacer paro. Pero no vamos a dejar que nos quiten nuestros derechos, porque este gobierno asumió hablando de diálogo, dijo que había que cuidar a los docente, y que nos convocaba a vivir mejor. Si vivir mejor significa aceptar salarios más bajos, preferimos seguir como estábamos y luchar por más».
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