Jorge Capitanich dialogó con La Señal acerca de los últimos acontecimientos de la política nacional. Tras analizar la visita de Barack Obama como un error de la actual Cancillería argentina, se refirió al sentido de la política exterior del gobierno de Mauricio Macri, analizó su política interior y expresó su punto de vista acerca de la interna del Justicialismo.
«¿Cómo no va a venir Obama si el gobierno argentino promueve cerca de 20.000 millones de emisión para pagarle al contado a Fondos buitre (que en definitiva hacen un fenomenal negocio) y si la transferencia de recursos no ingresa a la Argentina sino que muy por el contrario son recursos que engrosan las arcas de Estados Unidos? La verdad que como presidente de Estados Unidos lo menos que tendría que hacer es venir y felicitarlo», enfatizó el dirigente chaqueño.
Luego añadió: «Se plantea la restauración conservadora a través de un política muy clara: matriz autoritaria en lo político, ajuste ortodoxo en lo económico, exclusión y distribución inequitativa del ingreso en lo social. Esto es un paradigma que lo han aplicado siempre. Algunos en el justicialismo dicen que hay que esperar 100 días. No hay que esperar ni un día para darse cuenta de las políticas públicas que plantean. La devaluación sin plan, salvaje, con un ajuste ortodoxo de transferencia de ingresos, fue desde el primer día clara y contundente».
Por eso «tenemos que bregar por la unidad, con contenidos, respetando la diversidad. Esto significa que el justicialismo no exprese una estrategia funcional al macrismo porque eso sería su desaparición, su extinción y su aggiornamiento a una centroderecha de base neoliberal».
En esa dirección completó: «Nosotros tenemos que estar muy preocupados en varios aspectos. Primero, no expresamos la dinámica de los movimientos sociales; nosotros no expresamos las dinámica de la Argentina de los últimos doce años y medio; tenemos una burocracia sindical sin una pertenencia a un proyecto nacional, popular, democrático, humanista y cristiano. Si no decimos estas cosas corremos el riesgo claro de perder nuestra propia identidad».
Finalmente Capitanich afirmó que el rol a jugar por la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner depende de la decisión que ella tome, y que su condición de referente para el pueblo argentino es indiscutible por sus políticas de inclusión social y defensa de la soberanía nacional.
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