
El Sindicato Federación Gráfica Bonaerense elaboró dos documentos contundentes sobre el presente nacional y la realidad que atraviesa el sector. Uno de ellos se titula “El gobierno de Macri es provocador” y el otro “En defensa del trabajo gráfico”.
“Estamos presenciando nuevas formas de avasallamiento a los trabajadores y el Pueblo en su conjunto” arranca el primer material. Añade que “La violencia ejercida por medio de los decretazos hacia las mayorías populares, hacia las instituciones y la democracia no tienen precedentes en la historia de nuestra Patria; más aún si contemplamos el fabuloso blindaje mediático con el que dispone el presidente Macri”.
Luego indica que “Lo más preocupante es que el gobierno gerencial, a través de uno de sus voceros, el ministro de Hacienda y Finanzas Prat Gay, pretende disciplinar y amedrentar a nuestras organizaciones gremiales y al conjunto de la clase trabajadora manifestando que `cada sindicato sabrá dónde le aprieta el zapato y hasta qué punto puede arriesgar salario a cambio de empleo`”.
Por eso, la FGB precisa que “Si algo aprendimos de nuestra historia es que la receta neoliberal sólo beneficia con más riquezas a las corporaciones y las minorías del privilegio”. Así “estamos convencidos que la ecuación que favorece a los trabajadores es la que sostuvimos estos últimos años: más puestos de trabajo para generar mayor producción nacional, poder adquisitivo del salario e incrementar de esta forma, el consumo interno. Ese es nuestro zapato” concluye.
Sobre la industria gráfica
El otro material advierte acerca del “riesgo que corren miles de puesto de trabajo de la industria ante el levantamiento de los controles a la importación de libros anunciado por el gobierno nacional”.
Frente a esta situación indica que “La medida sólo servirá para alimentar el negocio de algunas grandes editoriales que en el pasado, y con la excusa de promover la libre circulación de la cultura, acumularon fabulosas ganancias imprimiendo en el exterior”.
Por eso la FGB “reclama expresamente al gobierno que todo lo que se edita en el país se siga produciendo en el país, en resguardo de la producción y el empleo nacional, y por respeto al sector de la industria gráfica argentina que, merced a su elevada capacidad técnica y humana, logró cuadruplicar la producción de libros en el lapso de los últimos 12 años”.
FGB / GF / LSM / RG