La Cámara de Casación Penal realizó un hábeas corpus en el que pidió igualdad de derechos laborales para los presos, lo que despertó la polémica. No faltaron las críticas, ni los cuestionamientos, pese a que el artículo 14 bis de la Constitución Nacional establece que el trabajador debe contar con condiciones dignas y equitativas de labor, jornada limitada, descanso y vacaciones pagas, retribución justa, salario mínimo vital móvil, etc.
Julio César Fuque, presidente de la Cooperativa Kabrones, que integran detenidos y ex presos, dialogó en Desde el Barrio al respecto y aseguró que se debe modificar el pensamiento del Servicio Penitenciario.
“A una persona que tenés encerrada adentro de una cárcel y con la mente desocupada, es taller del diablo, porque está al pedo, pensando en hacer maldad, en construir odio y venganza. Por eso hay que contenerlas”, expresó Fuque. Y agregó: “Creo que dentro de las cárceles deben trabajar civiles profesionales, para que haya un cambio de reinserción real”.
Además, el presidente de la cooperativa Kabrones manifestó que “la gran problemática del afuera” está en la cárcel. “Es ahí adentro donde nosotros tenemos que luchar para que entren personas que realmente trabajen en el tema de la reinserción. La cárcel se debe convertir en un lugar de transformación (…) Si modificamos el pensamiento del servicio penitenciario y construimos colectivamente va a haber cambios reales fuertes”.
En diálogo con Carlos Aira y Carla Pelliza, Fuque añadió “tienen que dejar las escopetas de lado, tienen que trabajar profesionales”.
Sobre Kabrones
Julio César Fuque también hizo referencia al surgimiento de la cooperativa Kabrones en el 2009 e hizo hincapié en los problemas que generan la falta posibilidades y la importancia de la inclusión social.
“Venimos trabajando por una necesidad de saber qué hacer cuando salimos en libertad, a qué nos dedicamos. Cuando te pones a hablar con compañeros que llevan muchísimos años detenidos, la pregunta es ¿Cuántas veces reincidiste? Hay quienes te dicen cuatro, cinco, seis veces y ahí decís ¿pero por qué tanto? Es la falta de oportunidades. Muchos al quedar en libertad no tienen la posibilidad de reinsertarse en la sociedad. Tanto el sector privado como el mismo Estado te piden certificado de antecedentes laborales y penales. Eso nos juega en contra, porque hay bastantes que estuvieron detenidos 10 o 20 años y no tienen antecedente laboral siendo el penal bastante complicado”, sostuvo el presidente de Kabrones.
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