El abogado Alfredo Guevara, integrante de la Asociación Xumek, para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos, dialogó en Abramos La Boca, sobre el proyecto de reforma del Código Procesal Penal.
Según el Dr. Guevara, el proyecto de ley vuelve a incorporar el «paradigma de la represión» dado que la primera incorporación la prisión preventiva por conmoción social lo hizo «la dictadura militar y fue derogada por el gobierno democrático de Alfonsin» y ahora «es nuevamente introducida en éste proyecto». No obstante aclaró que «si bien acompañamos el cambio de un modelo inquisitivo por un modelo acusatorio, que entendemos responde a una demanda de amplios sectores de la sociedad; sí objetamos esta incorporación».
Asimismo, Guevara remarcó que el concepto de criminología mediática refiere al «rol que juegan los medios en las nuevas formas de control social, que corresponde a ésta etapa histórica a nivel global» que se imponen desde EEUU «como parte de su agenda de dominación global con respecto a la guerra contra el crimen» y «la guerra contra el crimen significa colocar a un enemigo, en toda guerra hay un enemigo y el enemigo como tal carece de derechos o tiene menos derechos que el resto de la población».
En éste sentido, el abogado aclaró que la incorporación del concepto de conmoción social al proyecto de ley aislada «del contexto global y de la realidad latinoamericana que nos toca vivir, nos plantea esta paradoja: nosotros que hemos venido luchando desde hace tantos años para democratizar la palabra a través de una Ley de Medios, que lamentablemente hasta el día de hoy los medios concentrados se niegan a cumplir; le otorgamos, a través de ésta norma, una ventana para que ejerzan ese poder, que no es otro más que esta política de seguridad impulsada por los poderes hegemónicos globales».
Guevara recordó que «el término conmoción social está sujeto a distintas interpretaciones, depende de quién lo realiza y a quién conmueve; si nosotros sabemos que los medios de comunicación tienen ese poder tan enorme, son ellos los que seleccionan de acuerdo a sus intereses, de su ideología, cuales son los casos que implican la conmoción social. Y ésto es otorgarle un poder enorme a una minoría privilegiada que tiene intereses corporativos muy concretos y específicos».
Si bien el abogado señaló que es posible hacer una larga lista de lo que puede estar tipificado dentro del concepto conmoción social, que iría desde catástrofes naturales hasta los saqueos, Guevara aclaró que «el discurso de la criminología mediática se impone en ésta etapa de sociedades de control a través de los medios» y remarcó que es a través de ellos que «se configuran y se recortan el problema de la seguridad a determinados hechos que son los atentados contra la vida y la propiedad» y que «se invisibilizan otros como aquellos vinculados a los delitos económicos o aquellos vinculados a la violencia institucional: tortura, gatillo facil» que son de conmoción social «pero que los sectores más vulnerados, que sufren de la desigualdad estructural, y que no tienen el poder que tienen los medios como para instalarlos».
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