Carlos Rozanski, ex juez titular del Tribunal Oral Federal N°1 de La Plata, el cual condenó a perpetua al represor Miguel Etchecolatz, fue entrevistado en Radio Gráfica al cumplirse 12 años de la segunda desaparición de Jorge Julio López, quien estaba por declarar en el marco de dicho juicio.
«En el momento que sucedió no imaginé que fuera una desaparición, pensé que estaba demorado para llegar a la audiencia. Esperamos hasta que la preocupación creció y Adriana Calvo dijo ´López desapareció`. Mi respuesta inmediata fue ´Si López desapareció, me voy de la Argentina` porque me parecía absolutamente imposible que en un país democrático desapareciera una persona. Efectivamente, el tiempo confirmó que así fue. Hasta el día de hoy, son 12 años de impunidad», relató el letrado.
En diálogo con Lucas Molinari, el ex juez consideró que con la desaparición de López «se intentó silenciar al resto de los testigos, intimidarlos para que no vayan a declarar y que los tribunales estén intimidados, cosa que no sucedió».
«Mi sensación es que el gobierno de turno estaba interesado en que se esclarezca pero todo el sistema completo no estaba preparado para la desaparición de personas y no se tomó consciencia de la gravedad institucional que tenía para el país», analizó respecto a la investigación que comenzó tras el 18 de septiembre de 2006.
Sobre la prisión domiciliaria otorgada al represor Etchecolatz, Rozanski aseguró: «no me sorprendió para nada» porque «estamos viviendo el peor momento en materia de Derechos Humanos de los últimos 40 años. Desde la dictadura hasta hoy, este es el peor momento en garantía de derechos en todo sentido, no solo en el avance de juicios, sino en la vulneración de todo tipo de derechos» como «presos políticos y asesinatos por la espalda».
Por último, el ex presidente del TOF 1 reflexionó que «la ciudadanía tiene que actuar en consecuencia para evitar todo lo que tenga que ver con un retroceso».
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