
Por Carlos Aira, enviado de Radio Gráfica en Rusia 2018
Sochi es extraña. Junto al Mar Negro, sus delfines y la montaña Polyana. Un clima subtropical inconseguible en toda Rusia. Palmeras y hoteles que dan un ambiente de Caribe a una ciudad que tiene una de las fronteras más candentes del mundo: la de Abasajia del Norte.
Acá nos trajo el fixture. Aquí esperábamos a la Selección Argentina en cuartos. En el magnífico Estadio Fisch jugará Croacia ante una Rusia que ya está siendo atacada por la prensa británica. La sombra del doping. Los súbditos de la Pérfida Albion se preguntan cómo un equipo ubicado 70 en el puesto FIFA llegó a esta instancia mundialista? La porquería se desparrama en portales y medios afines. El deporte ruso pagó fuerte la organización de los Juegos de Invierno 2014, curiosamente en Sochi: una ONG ligada al deporte denunció la falta de controles por parte de la Federación Rusa. Como si fuera la Guerra Fría, el juicio fue sumario: los atletas rusos no pudieron participar en los Juegos Olímpicos en diversas categorías.
Nadie analizó la pelota y la estrategia. Contra Uruguay, Rusia salió a atacar. Los orientales no son Arabia o Egipto. La respuesta fue un contundente 0-3. Contra España, la táctica rusa fue diametralmente opuesta: salieron a defender. Cortar espacios. Darle por demás la pelota a España. Conocedores de sus limitaciones, los locales hicieron un partido inteligente. En los penales, el festejo fue todo ruso.
Argentina no está en el Mundial. Duele a pesar de lo previsible. A la distancia se olfatean las operaciones. La Nación pública una nota tan tendenciosa cómo berreta: el 87& de sus lectores quieren la salida de Claudio Tapia. El diario de los Mitre algo conoce de golpes de Estado, por eso encabeza la avanzada destituyente.
Tapia es presidente por el pacto Círculo Rojo – Moyano y Ascenso Unido. En otros términos: Macri-Moyano. La única forma que encontró el Ejecutivo Nacional en aquel verano de 2017 para cerrar la eterna sucesión de Julio Grondona. Su Comisión Normalizadora había sido un fracaso rotundo. Su idea de asfixiar económicamente a los clubes entregando en cuentagotas el dinero de FPT tampoco había doblegado la moral de dirigentes que sabían que la subsistencia de sus clubes dependía de una unidad en acción.
Rota la alianza Macri-Moyano, la AFA es coto de caza. La avanzada sobre Independiente (Bebote Álvarez-Pibes de inferiores) fue una muestra del poder de fuego del gobierno. La idea es reducir AFA a una mínima expresión. Si la Superliga es el modelo de negocios que trajo el nefasto Javier Tebas – presidente de la Liga de Fútbol Profesional española – a pedido de Marcelo Tinelli y Juan Sebastian Verón, ahora buscan que la Selección, luego del fracaso de Rusia, quedé en manos… profesionales.
Nadie dice que Jorge Sampaoli fue traído por Daniel Angelici, quien viajó especialmente a Sevilla y rubricó la operación. La memoria del periodismo deportivo monopólico es curiosamente selectiva. Nadie puede garantizar que Sampaoli siga en el cargo, pero si es cierto el apoyo brindado por más de cuarenta presidentes de clubes a Claudio Tapia apenas llegó a Ezeiza. Saben que van por él. Porque demostró inteligencia para manejar una situación complejisima luego de la derrota ante Croacia, que dimos cuenta en Radio Gráfica. Pero sobre todo, al igual que durante 2016, los dirigentes se juntan porque saben que se los quieren llevar puestos.
Al 87% de los lectores de La Nación no le gustan los gorditos, morochos con pelo cepillo. Los dirigentes, que conocen la verdad del asunto, se encolumnan detrás de él. Pura sobrevivencia. Cosas del día después.
Les dije que hace un calor bárbaro acá?