Entrevistado por Punto de Partida el referente del movimiento Patria Grande, Itaí Hagman, evaluó el debate presidencial y reflexiono sobre el tramo final de la campaña rumbo al ballotage así como sobre las perspectivas económicas del futuro cercano.
«De parte de Macri fue muy evidente cómo evitó dar cualquier precisión sobre su plan económico, que fue el punto más fuerte donde no casualmente hizo énfasis Scioli y donde más fuerte se ha venido discutiendo en las últimas semanas: que el PRO no está diciendo qué es lo que va a hacer, y cuando sale algún economista de su equipo a plantear las medidas, o cómo pasó en el debate, le preguntan a Macri, él se hace el sota y sale por la tangente. Me parece que eso fue muy evidente, pero también uno tiene la duda de cuánto estos debates influyen realmente a la hora de decidir el voto» se interrogó.
«La esperanza que tengo de que esta tendencia que aparentemente se instaló de Macri favorito se pueda revertir o se pueda modificar tiene que ver con lo que está pasando por abajo, precisó. El fin de semana estuve recorriendo varias plazas de la ciudad de Buenos Aires y se ve una movilización de gente. No solo de militantes sino de ciudadanos que no están organizados y que están saliendo de manera autoconvocada a la calle a hacer actividades, a discutir con la gente, y me parece que ese es un dato muy alentador. Hay una preocupación genuina de un sector importante de la sociedad que está preocupada por lo que sucedería con un gobierno del PRO. Y me parece que ese puede ser el elemento más interesante. Uno tiene la duda de si eso es un fenómeno que puede ser grande pero que no deja de ser un microclima, o si realmente puede permear a muchos sectores que estaban pensando en votar a Macri para que empiecen a dudar, o que estaban pensando en votar en blanco y se decidan a votar a Scioli para que no gane el PRO. Esa es la gran expectativa que hay. Si se logra que no gane el PRO el domingo y que gane el Frente Para la Victoria, va a ser fundamentalmente un triunfo de la militancia y de los sectores que han salido a la calle a partir de esta situación».
Añadió que «luego habrá que ver cómo es un gobierno de Scioli, pero indudablemente un triunfo suyo se va a vivir como un triunfo popular porque es revertir una situación que se ha instalado donde Macri es el favorito. Ganó la provincia de Buenos Aires, todas las encuestas lo dan primero, e indudablemente hay una operación muy fuerte tanto a nivel local como a nivel internacional para que Macri sea presidente. Derrotar eso sería sin dudas un triunfo popular. El domingo vamos a festejar. Seguramente del lunes en adelante vamos a discutir fuertemente sobre lo que va a ser un gobierno de Scioli».
«Efectivamente estamos viendo muchas movidas especulativas, que tienen que ver con aumentos de precios de manera anticipada, con acaparamiento de los productos exportables -explicó Hagman-. Estamos en una situación donde prácticamente no se está exportando porque se está acaparando la producción en los famosos silobolsas, esperando liquidarla una vez que se libere el tipo de cambio. Recordemos que cuando fue la devaluación en enero del año pasado (que fue pequeña en comparación con lo que está planteando Macri) hubo primero un episodio de acaparamiento, de especulación importante por parte de los exportadores. Con lo cual si gana Scioli el desafío principal va a ser enfrentar esa situación. Puede haber una corrida sobre la moneda. Por supuesto que el control cambiario ayuda a que la corrida sea más fácil, pero como el poder del comercio exterior, de las exportaciones, está en muy pocas manos y son un puñado de empresas las que controlan prácticamente todas las exportaciones de la Argentina, tienen este poder para especular contra nuestra economía sobre el movimiento del tipo de cambio. Es importante avanzar en algún momento en la Argentina en el debate de cómo se le quita este poder a estas empresas y cómo avanzamos para que el Estado sea el que administre el comercio exterior».
MG / GF / RG